Los inversores confían en que la sangre del Brexit no llegará al río (al Támesis, claro)

A la vista de la evolución de los mercados financieros en las últimas horas da la impresión de que los inversores confían en que la sangre británica no llegue al río del Brexit. La libra esterlina cotiza estable esta tarde en 1,2860 dólares.  Ha bajado hoy de forma muy suave la Bolsa de Londres, mientras han cerrado con ganancias las restantes plazas financieras europeas. El índice Ibex 35 ha subido un 0,7 por ciento hasta 8.912 puntos. Han subido con cierta fuerza algunas de las empresas españolas con mayor presencia en el Reino Unido, como la aerolínea IAG, Ferrovial, Telefónica o los bancos Sabadell y Santander.  Han bajado ligeramente las restantes empresas con intereses en Gran Bretaña, como Inditex.

El mercado descuenta que se retrasará la fecha tope del Brexit, prevista inicialmente para finales de marzo. Y, una vez que se gane tiempo, creen que triunfará el humor inglés y la historia terminará, después de dos años de agonía, con un Brexit blando o incluso con un no Brexit“. De momento, los mercados europeos han mantenido la calma tras la contundente derrota que sufrió ayer la primera ministra, Theresa May, en el parlamento británico. Las incógnitas son muchas, pero los mercados confían en que no se producirá un Brexit caótico, simplemente por que es una opción que no beneficia a nadie.  A veces la lógica más simple es la más aplastante.

A la espera del resultado de la moción de censura contra la primera ministra Theresa May, los mercados se han fijado en las cifras macroeconómicas que se han publicado en el Reino Unido. La inflación se ha contraído dos décimas en tasa interanual, hasta el 2,1 por ciento, que es su nivel más bajo en los últimos dos años. Es un dato.

En los demás mercados, el euro pierde fuelle, se cambia ligeramente por debajo de 1,14 dólares. El petróleo aguanta por encima de 60 dólares por barril. La prima de riesgo de España se reduce a 115 puntos básicos, con el rendimiento del bono a diez años en el 1,38 por ciento. Mañana la tesorería pública venderá bonos y obligaciones a 3, 5 y 10 años. Quiere captar hasta 5.000 millones de euros. Los títulos a tres años muestran rendimiento negativo,  del menos 0,039 por ciento.  La rentabilidad de las obligaciones a cinco años es el 0,329 por ciento. El Tesoro ha presentado esta semana su plan de financiación para este año, que contempla unas emisiones netas de deuda de 35.000 millones de euros.