Tres millones de parados y falta de mano de obra: cuál es la razón y qué profesiones buscan trabajadores

En España tenemos una paradoja. Con más de tres millones de personas en paro, la tasa más alta de la Unión Europea, hay sectores que se encuentran con problemas para encontrar personal.

Es el caso de la construcción que emplea actualmente a 1,3 millones de personas y que puede sufrir un frenazo si no cambian las tornas. La cifra no es pequeña; se estima que se necesitan 700.000 empleados. Entre ellos faltan jefes de obra, peones, albañiles, encofradores o gruistas.

Esta escasez de mano de obra cualificada en el sector amenaza la ejecución de los 3.420 millones de euros de los fondos europeos que está a punto de recibir España para la rehabilitación energética de su envejecido parque de viviendas. La patronal lleva meses alertando de que no hay trabajadores suficientes para cubrir esta cantidad de proyectos tan jugosa.

Sí que prevé que puedan regresar muchos de los trabajadores que se pasaron a la hostelería tras la crisis de 2008, pero al sector no le salen las cuentas, sobre todo en lo que se refiere a puestos cualificados. Entre 2008 y 2020 el porcentaje de trabajadores menores de 34 años ha bajado en la construcción del 42 % al 18 % y en 2030 se jubilará el 30 % de los profesionales especializados en sus oficios.

¿Cómo es posible incorporar 700.000 personas al sector cuando está pasando todo lo contrario y se va a construir todo lo necesario con un personal cada vez más envejecido y con menos formación? Esa pregunta queda en el aire pero necesitarña de una pronta solución.

Se demandan también, según ha advertido la periodista Pilar García de la Granja en Herrera en COPE, "conductores de palas y de camiones". A ellos hay que sumar las carencias en el sector de la hostelería "que dice no encontrar camareros".

¿LA RAZÓN?

Mucho paro y falta de mano de obra, solo tiene una explicación, "los salarios no pueden ser más altos porque los costes laborales se han disparado, y las personas en paro, o no están formándose para estos empleos o les compensa estar parados", advierte De la Granja que lo tacha de "muy preocupante".