¿Qué es el Euro digital y cuándo se podrá pagar con él? Así es la fase de prueba que inicia el Banco de España

Cada vez son más los que pagan con tarjeta, con el teléfono móvil o envían dinero de forma instantánea a través de Bizum. El uso de efectivo ha quedado relegado a unos pocos y dentro de poco podríamos dejar de escuchar eso de “con tarjeta o con efectivo”. Y es que el eurodigital está cada vez más cerca. En 2025 el Banco Central Europeo pretende ponerlo en circulación. Pero el Banco de España ya ha autorizado la primera prueba piloto. La fintech MONEI será la encargada de emitir los primeros euros digitales, a los que ha llamado EURM.

Solo unos pocos usuarios serán los encargados de testar la aplicación. De momento, solo estará disponible para operaciones dentro de España. Para conseguir los euros digitales, el usuario tiene que introducir su número de teléfono, cotejar su identidad mediante identificación por vídeo y cargar el monedero de la aplicación con un máximo de 10 euros reales que se transforman de forma automática en euros digitales. Estas monedas virtuales solo podrán intercambiarse entre particulares o empresas registradas en esta plataforma. El dinero estará custodiado en dos cuentas de salvaguarda de BBVA y Caixabank y se podrá canjear por euros físicos en cualquier momento. Tras la fase de pruebas se elaborarán los informes y una vez recabada la información, el Banco de España deberá decidir si autoriza su apertura al público en general.

El eurodigital es uno de los grandes desafíos del Banco Central Europeo. Esta moneda va a permitir llevar los pagos a un nivel totalmente digitalizado y va a facilitar el envío de dinero a escala mundial. Los consumidores que paguen con tarjeta, con el móvil o con el reloj no van a notar el cambio porque los euros siguen siendo los mismos. Pero la banca si que se vería afectada. En COPE hemos hablado con Luis Garvía, experto financiero, quien ha explicado que “la esencia del negocio del sector bancario cambia. Hasta ahora los bancos disponían del dinero de sus clientes y los tenían controlados, pero con el eurodigital gran parte de este control pasaría al Banco Central. Por eso la banca debería reinventarse”.

Esta moneda va a dar más poder tanto a los ciudadanos como a los gobiernos. Lo que tiene sus pros y sus contras. “Significa más poder. Si se usa de forma ética va a significar un estado más eficiente y más transparente, porque va a haber un mayor control de las finanzas públicas. Pero si se utiliza de forma negativa, este mayor control va a suponer un estado más totalitario”, explica Garvía. Aunque, el experto financiero añade que “actualmente ya estamos controlados por Hacienda”.

Otro riesgo que preocupa a los expertos es la desigualdad social que puede crear esta moneda, ya que su uso puede dejar a un lado el dinero en efectivo. “Hay que tener en cuenta que todavía hay gente que lo sigue utilizando, por ejemplo aquellos que no tienen conocimientos tecnológicos. Si no se implementa de forma correcta muchas personas pueden verse excluidas financieramente”, cuenta Luis Garvía. Por lo que va a ser necesario buscar alternativas que permitan mantener un equilibrio entre ambas formas de pago.