Raquel, enferma de ELA, relata a Mediodía COPE cómo ha sido su lucha por estar en una mesa electoral
La Junta Electoral le ha recocido el derecho a estar en esa mesa electoral, si así le toca, porque no se presente el vocal de turno
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Vaya ejemplo el que a todos nos está dando Raquel. La conocimos el pasado 8 de mayo cuando aquí en 'Mediodía COPE' nos hizo partícipes de su último reto: se había propuesto estar en una mesa electoral. Y lo ha conseguido. Raquel, que tiene 47 años, es enferma de ELA desde hace 5.
No tiene movilidad en brazos ni piernas. Bebe y come a través una sonda. Y ya no puede hablar. Se comunica gracias a un ordenador que mueve con el iris de sus ojos.
A ella le llegó la notificación como a muchas personas de nuestro entorno para estar el domingo en esa mesa electoral. Como suplente en su caso de vocal. Pero ella quería estar.
Así que nada más enterarnos por ella, pedimos a Raquel grabar una entrevista. Y lo hemos hecho esta mañana, porque es algo que no es complicado pero requiere de más tiempo.
Raquel pedía una serie de adaptaciones. "Un asistente que me ayudase a manipular los listados, o, en su defecto, un pendrive con el listado de los votantes para revisarlo con mi comunicador. Y un enchufe para no quedarme sin batería".
Además, solicitaba que su asistente personal "pudiera acompañarme toda la jornada para lo que pudiese necesitar. La solución que me han dado es que mi propio asistente podía ayudarme con las funciones que me tocarían realizar. Hoy nos volverán para facilitar sus datos".
La Junta Electoral le ha recocido el derecho a estar en esa mesa electoral, si así le toca, porque no se presente el vocal de turno.
Ella espera poder estar para "demostrar así que las personas enfermas de ELA tenemos las capacidades suficientes para realizar cualquier cosa que nos planteen con las adaptaciones necesarias".
Sobre lo que le han dicho otras personas en esta lucha que ha emprendido, ha asegurado que "para gusto están los colores. La mayoría me dicen que soy una valiente y la minoría que estoy loca. Lo bueno de esta enfermedad es que al no poder hablar no tendré que dar explicaciones y me limitaré a sonreír".
Desde el principio, algunas personas le aconsejaban que renunciase. "Envié un burofax para dejar constancia de mi decisión de no renunciar para cumplir como obligación y derecho de participar en la mesa electoral", ha explicado.
Raquel, por último, ha querido agradecer a 'Mediodía COPE' el interés por su historia. "Os mantendré informados de si finalmente tengo que estar en la mesa electoral el próximo domingo".