Denuncian apoyo institucional a un relato que "edulcora" y "legitima" a ETA

Covite y la Fundación Fernando Buesa Blanco han mostrado su rechazo a una jornada que se dedicará en Bayona a la "mirada" del cineasta francés Thomas Lacoste sobre "el conflicto vasco" porque supone "dar apoyo institucional a una visión de la historia reciente del País Vasco y Navarra que adolece de notables sesgos" y "edulcora" y "legitima" a ETA.

Estas dos entidades de víctimas del terrorismo, junto a Gogoan por una memoria digna y Ego Non, han remitido una carta a los organizadores de la jornada, que tendrá lugar el 16 de marzo, así como a varias instituciones españolas y francesas, en las que señalan que los trabajos de Lacoste "utilizan fuentes parciales e ignoran las aportaciones de los principales investigadores sobre la historia reciente del País Vasco y Navarra".

El presidente de la Mancomunidad de Iparralde, Jean-René Etchegaray, y el lehendakari, Iñigo Urkullu, son algunos de los receptores de la misiva, en la que denuncian "el ocultamiento" de las víctimas de ETA en "todos los documentales" de Lacoste, lo que en su opinión obedece "a la intención de crear un relato sobre el mal llamado conflicto vasco que ignora a las víctimas".

La jornada ha sido organizada por el Institut Culturel Basque, la Universidad Bordeaux Montaigne, el Instituto Etxepare, el Laboratoire Iker, el Basque Anthropological Institute, la UMR 5319 Passages y el Ethnopôle Basque.

Las cuatro entidades que firman la carta consideran "preocupante" que instituciones oficiales "se presten a favorecer la difusión de un relato parcial encaminado a edulcorar la trayectoria sangrienta de ETA y a legitimarla". "Algo que no ocurre, justificadamente, con el yihadismo", apostillan.

Destacan que para Lacoste y "su círculo de influencia" las víctimas de ETA "son el elefante en la habitación; invisibles, por tanto, inexistentes".

"La retórica épica difumina a las víctimas y lo hace además con la utilización de un lenguaje de apariencia noble. Thomas Lacoste y los Artesanos de la Paz -organización para cuyo activismo los trabajos del primero son un poderoso instrumento de comunicación- se aprovechan de la mezcla de desconocimiento y desinterés en una parte de la población vasca en Francia respecto a la historia real de ETA para difundir un relato tendencioso sin que suscite apenas reacción alguna", subraya.

"No es de recibo que, desaparecida ETA, un sector de la población ideológicamente afín construya en la parte de la población vasca en que no ha habido víctimas de esta organización una suerte de santuario narrativo revisionista que ponga colores cálidos a una historia de desolación y terror", remarcan.