¿Qué decía Sánchez de los silencios de Rajoy?

Donde dije Rajoy, digo silencio. Esto o la técnica del avestruz. Esa es una de las prácticas que el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, ha convertido en hábito de gobierno. 

Famosa fue la comparecencia de Mariano Rajoy en la sede de Génova 13 de Madrid a través de un plasma, sin preguntas para los medios. Eso dio pie a todo tipo de críticas, comentarios y chanzas en la oponión pública. Como no, también cayeron sobre él los reproches de la oposición. 

Uno de los principales críticos del exinquilino de la Moncloa, era, como jefe de la oposición, Pedro Sánchez, que en más de una ocasión hizo referencia al silencio de Mariano Rajoy ante la prensa, especialmente cuando al entonces presidente del Gobierno y del PP le venían mal dadas. 

Pero una de las marcas de la casa de Sánchez durante su mandato ha sido, precisamente, su alejamiento de los medios. Sin ir más lejos, ha pasado casi de perfil en la última semana por los dos escándalos que han golpeado de lleno al Gobierno: las grabaciones de Dolores Delgado en una cena con el comisario Villarejo y la casa que el ministro Pedro Duque compró a nombre de una sociedad para pagar menos impuestos. 

Pero, cuando era Rajoy el que huía de los medios, vía plasma o directamente sin comparecer, ¿qué era lo que decía Sánchez?

En 2014, en relación a un problema que continúa en la actualidad, la violencia machista, Sánchez decía que le "gustaría que el presidente del Gobierno condenara algún atentado machista". Los crímenes machistas se suceden y Sánchez los condena vía Twitter. 

Cuando en 2015 la trama Púnica amenezaba al PP de Madrid, afectando principalmente a uno de los pesos pesados de los populares madrileños, Francisco Granados, Sánchez hablaba de "silencio cómplice" por parte de Rajoy y de Esperanza Aguirre. El ahora presidente del Gobierno arguía que tanto Rajoy como Aguirre tenían "mucho que callar".

"¿Para cuándo la rendición de cuentas en la Asamblea y en el Congreso de Cifuentes y Rajoy?", se preguntaba Sánchez. 

Una vez en La Moncloa, Sánchez estuvo más de un mes sin conceder una rueda de prensa ante los medios. Al contrario que Mariano Rajoy, que sí se puso ante los medios varias veces en sus primeros días al frente del Gobierno. 

Los dos últimos días, a cuenta de Cataluña, Sánchez ha seguido refugiado en Moncloa y ha mandado a Isabel Celáa a dar la cara ante la prensa. En los disturbios de este lunes, el Gobierno directamente no compareció. Y ante la amenaza de Torra este martes poniendo un ultimátum al Gobierno, ha sido la portavoz del Ejecutivo la que ha respondido al presidente de la Generalitat. Sánchez se ha limitado a Twitter las palabras de Celáa. 

Hasta el momento, a Sánchez no parece gustarle más que a Rajoy enfrentarse a los medios.