El Rey Don Juan Carlos pasa su segunda noche en Sanxenxo y este sábado vuelve a disfrutar de un día de regatas

El Rey Don Juan Carlos ha pasado su segunda noche en Sanxenxo, en casa de su amigo Pedro Campos. El Emérito ha vuelto a España de visita, tras dos años fuera de nuestro país, para disfrutar de un fin de semana en Galicia. En la jornada del viernes, Don Juan Carlos ha navegado en una lancha que apoya al 'Bribón', que ha quedado primero en las dos pruebas celebradas.

Este sábado, en Sanxenxo, se espera algo menos de viento a la hora de las regatas, así que está por confirmar que el Rey emérito vuelva a navegar. La tripulación ha informado a COPE de que Don Juan Carlos está más delgado, actualmente pesa unos 87 kilos y necesita bastón para caminar. Sin embargo, esto no es un impedimento a la hora de dirigir el barco, porque los patrones van sentados en estos veleros.

Después de haber ganado las dos mangas del viernes, el encargado de la vela mayor del Bribón, el primer campeón olímpico español, Jane Abascal, reconocía que la tripulación quiere que el Rey emérito pueda navegar de nuevo. "A nosotros nos transmite una ilusión que da gusto tener. Llevamos 5 años navegando juntos y le hemos cogido mucho cariño toda la tripulación", ha apuntado Abascal, añadiendo que "ha sido una gran alegría poder disfrutar con él este fin de semana".

Está previsto que este sábado, los barcos salgan del puerto en torno a las 12 de la mañana, hora en la que podremos saber, de manera definitiva, si Don Juan Carlos vuelve a salir al mar. Además, está previsto que la competición de comienzo en torno a la 1 del mediodía.

La visita del Rey a España se ha producido casi dos años después de su marcha y ha generado una gran expectación. Por este motivo, está siendo realmente difícil cumplir las indicaciones de discreción máxima, que han recibido los medios implicados en el dispositivo de seguridad de Don Juan Carlos.

Ejemplo de ello ha sido su llegada al Real Club Náutico de Sanxenxo, en la mañana de este viernes. Allí se ha desplazado junto a la Infanta Elena y su amigo personal y anfitrión Pedro Campos, y ha sido recibido con una bandera de España que ondeaba de uno de los balcones, efusivos saludos, vítores, aplusos y gritos de ¡Viva el Rey! y '¡viva la infanta, infanta!'. El monarca emérito visiblemente emocionado, se ha llevado la mano al corazón en varias ocasiones.

El monarca aterrizaba el pasado jueves en el aeropuerto de Vigo y, está previsto que antes de volver a Abu Dabi, donde ha fijado su residencia, se vea con su hijo, Felipe VI, y otros miembros de su familia, el lunes, en Madrid.