Rull y Romeva tratan de desacreditar al juez, al Supremo y al Poder Judicial
Forn pide a Llarena sin éxito que le ponga en libertad
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Los exconsellers Raül Romeva (Exteriores) y Josep Rull (Territorio) han tratado de desacreditar hoy al juez Pablo Llarena, al Tribunal Supremo (TS) e incluso al Poder Judicial al alegar que están ante un "juicio político" que toma decisiones en connivencia con la política del Gobierno central. Los dos líderes independentistas catalanes, junto al exconseller de Interior Joaquim Forn -todos en prisión preventiva- han comparecido hoy ante el juez del Tribunal Supremo para conocer su procesamiento por delitos de rebelión y malversación de caudales públicos dentro del sumario abierto por el "procés".
Como ya sucediera en la indagatorias de ayer, ninguno de los procesados ha entrado a rebatir los hechos que recoge el auto de procesamiento más allá de negar que haya habido violencia, según señalan fuentes de la acusación y de la defensa de los investigados. Lo que sí que han hecho es tratar de desacreditar al juez Llarena del que han cuestionado su imparcialidad, al Tribunal Supremo por su "falta de competencia" para conocer la causa e incluso, como ha dicho Rull, al Poder Judicial al alegar que en otros países europeos existe una Justicia mejor que la española. Salvo Forn, las fuentes han destacado el cambio de tono y de estrategia de Rull y Romeva, quienes en ocasiones anteriores habían sido menos incisivos y críticos con la actuación de la Justicia.
Especialmente duro ha sido Rull, que ha indicado que "antes" Llarena era considerado un "juez de prestigio", pero "ahora ya no", y ha denunciado que "no toma decisiones solo, sino acompañado por otros". Rull ha dado a entender que el juez actúa -a su juicio- en coordinación con el Gobierno y, en este sentido, ha señalado que el ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha "anticipado sus decisiones" judiciales en algunas ocasiones, unas predicciones que luego "se han cumplido", por lo que ha ironizado sobre el hecho de que el ministro sea "un oráculo", han indicado fuentes cercanas a la defensa. Tras cargar contra el juez y el Gobierno, el exconseller ha hecho lo mismo con el Poder Judicial cuando ha manifestado que "el juicio será un mero trámite" y que la Justicia española se guía por criterios políticos. "Vemos la luz en algunos países del norte de Europa donde existe una clase de Justicia mejor que está", ha dicho, tras las últimas decisiones de las autoridades judiciales de Bélgica, Alemania y Escocia donde se encuentran huidos el expresidente Carles Puigdemont y cuatro exconsellers. También Rull ha destacado que no se desvió dinero público al proceso independentista, para lo que ha mencionado al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, quien aseguró que no se gastó dinero público en el 1-O y, de hecho, las defensas no descartan citarlo como testigo en el juicio oral.
Igualmente, Raül Romeva se ha proclamado hoy "un demócrata" comprometido con la cultura de la paz y ha denunciado ante el juez la "criminalización" del independentismo por vías pacíficas. Tras reivindicar que Cataluña tiene "legitimidad" para ejercer la autodeterminación y que los diputados del Parlament están amparados por la "inviolabilidad", ha criticado que esta causa es política. Y ha denunciado la vulneración de derechos como el de la infancia, al no poder ver a sus hijos por estar encarcelado, así como que el Supremo carece de competencias para investigarlo.
Por su parte, Forn se ha descolgado de estas críticas y ha aprovechado su intervención para pedir al juez que revise su prisión incondicional al defender su arraigo personal y su abandono de la política como razones para pedir su puesta en libertad, una petición inusual en este tipo de trámite y a la que el juez se ha opuesto. Además ha defendido que durante su cargo como conseller de Interior siempre fue un cumplidor de la Ley, algo que siempre trasladó a los Mossos d'Esquadra.
Fuentes de la acusación que ejerce Vox han explicado que tras escuchar las críticas de los procesados, Llarena les ha recordado que ni estaba todo escrito antes ni lo está ahora y que siempre ha tomado decisiones en base a pruebas y argumentos. Para ello les ha puesto como ejemplo que algunos investigados no han sido procesados y que otros lo han sido por menos delitos de los que se pensaba en un principio. Mañana continuarán las declaraciones indagatorias con la expresidenta del Parlament Carme Forcadell, el exconseller de Presidencia Jordi Turull y la exconsellera de Trabajo, Dolors Bassa.