Sanidad tarda dos meses en acordar medidas conjuntas con las CCAA para frenar la pandemia

Después de ver la facilidad con la que el ministro de Sanidad, Salvador Illa, y las comunidades autónomas han llegado a un acuerdo este viernes, para la adopción de una serie de medidas con las que intentar frenar el alarmante aumento de contagios por coronavirus que se están produciendo en nuestro país tras entrar en la llamada nueva normalidad, son muchas las preguntas que surgen al respectos.

Sanidad tarda dos meses en acordar medidas conjuntas con las CCAA ​

Una de las más lógicas es el por qué el Gobierno de la nación ha tardado dos meses en reunir a las CCAA para la adopción de medidas consensuadas, conjuntas y unificadas con las que intentar controlar los contagios. Y es que el Gobierno pasó de aunar todo el poder en la persona de Pedro Sánchez; a casi lavarse las manos, dejando a las comunidades autónomas solas, para que cada una adoptase las medidas que considerase oportuna en su territorio.

Una inacción por parte del Ejecutivo central que se ha mantenido hasta este viernes cuando Illa ha convocado a las comunidades, a pesar de que muchas de ellas le han reclamado insistentemente la necesidad de una coordinación conjunta en las actuaciones contra la pandemia a nivel estatal, con la idea de ir todos de la mano pues, como ya ha quedado más que demostrado a tener del número de contagios que están registrándose, de nada sirve implementar unas medidas en una comunidad si en la que está al lado no son las mismas.

Esta reunión entre Ministerio de Sanidad y CC.AA. llega tarde. No porque lo digamos nosotros, sino porque muchas de las medidas que se adoptaron por unanimidad para todo el territorio nacional ya estaban siendo aplicadas desde hace días, e incluso semanas, en muchas comunidades españolas. Nos referimos, por ejemplo, a la prohibición de fumar en público, el control sobre el botellón, la limitación en las visitas a residencias o el poner un número máximo de comensales por mesa en bares y restaurantes.

Principales medidas consensuadas entre Sanidad y CCAA

En concreto, entre las principales medidas acordadas está la prohibición de fumar en la vía pública si no hay distancia de seguridad; el cierre de locales de ocio nocturno; distancia de un metro y medio entre mesas en restaurantes, terrazas y bares, así como en las barras y un máximo de diez personas por cada mesa, además, estos locales deberán cerrar a la 1 de la madrugada.

También se ha acordado realizar PCR a todos los ingresos en centros sociosanitarios 72 horas antes de su entrada y para los empleados que regresen de permisos y vacaciones, así como a los nuevos trabajadores; las visitas a residencias quedan limitadas a una sola persona con un máxima de una hora, realizándose éstas de manera escalonadas para evitar las aglomeraciones; aumento del control sobre los botellones; la autorización para eventos multitudinarios quedara supeditada a una evaluación del riesgo por parte de la comunidad autónoma.

El Gobierno sin un plan para el inicio del nuevo curso escolar

Ahora, y tras ver lo que ha ocurrido con este asunto y la reacción tan tardía que ha tenido el Gobierno, a pesar de los avisos y de reclamaciones de las comunidades, son muchos los que no quitan su mirada de otro problema que se plantea en el horizonte más próximo y que puede suponer, de seguir así, de una enorme gravedad: la vuelta al cole.

Estamos a un mes del inicio de un nuevo curso escolar y la vuelta a las aulas es toda una incógnita. Se trabaja para que regresen las clases presenciales pero la incertidumbre entre familias y profesores es absoluta, y su inquietud y preocupación aún mayor, especialmente por la ausencia de un plan por parte del Gobierno central y de los ministerios de Sanidad y de Educación, para volver a las aulas de manera segura.

Desde todos los sectores se insiste en que el regreso se tiene que producir con las suficientes garantías de seguridad, pero nadie parece tener claro cómo será posible conseguirlo y quien será el responsable de posibles contagios en las aulas.

La postura del Gobierno parece ser la misma que hasta ahora, dejar la pelota en el tejado de cada comunidad autónoma. De hecho, tras la reunión de ayer con éstas, y preguntado por los periodistas sobre este asunto, Illa se escudó en que “es una competencia de las comunidades autónomas”, aunque como reconoció varios consejeros “han manifestado su voluntad de compartir las medidas que están tomando y hay que seguir hablando en los próximos días”. Ahora sólo queda espera que esas nuevas conversaciones no lleguen de nuevo tarde.

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