Santiago Abascal en el punto de mira de The New York Times

No es la primera vez que The New York Times se fija en el líder de Vox. Esta semana el periódico estadounidense vuelve a poner la lupa en Santiago Abascal

Artículo The New York Times y Santiago Abascal

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

2 min lectura

El diario estadounidense The New York Times califica a Vox como de "extrema derecha" y "anti-inmigrante". "Vox, el partido de extrema derecha y contrario a la inmigración que se afianza en España "

En un artículo publicado esta semana, el diario afirma que la extrema derecha de España ha vuelto a encontrar su voz en Vox. 

Los analistas del periódico subrayan que el peso del partido de Abascal aún es pequeño en el conjunto de España, pero también dicen que podría ser clave en las elecciones europeas de mayo. "Vox es solo una corriente relativamente pequeña de una marea creciente de nacionalismo en Europa, desde Suecia, Francia y Hungría hasta Austria y Alemania, donde la alternativa de extrema derecha llegó al Parlamento en 2017".

Abascal: un orador apasionado ogulloso de llevar pistola

El New York Times califica a Abascal de "orador apasionado" que se "enorgullece" de llevar pistola y que se hizo famoso por ser un "feroz opositor" al separatismo en el País Vasco.

"Vox predica valores conservadores incrustados en la monarquía de España y el catolicismo (...). Defiende las corridas de toros y otras tradiciones españolas, y pide a España que recupere el control sobre Gibraltar (...)"

El New York Times también señala las vinculaciones de Vox con Viktor Orbanen Hungría y con Marine Le Pen en Francia. Y dice que recibió consejos de Stephen K. Bannon, exestratega jefe del presidente Trump, quien ha estado trabajando para construir un movimiento paneuropeo de partidos nacionalistas de derecha.

No es la primera vez

El resultado de las elecciones andaluzas hizo que el pasado 5 de diciembre The New York Times pusiera su atención en Vox. El artículo, "La bestia que dormía", comenzaba así:

"Hasta hace cuatro días,  Spain era different del resto de Europa porque no tenía un partido de extrema derecha realmente existente. La bestia, que se había despertado en muchos sitios, aquí seguía durmiendo (...) La derecha española era españolista sin beligerancia (...) Hasta que en las elecciones autonómicas andaluzas, un partido pequeño, nuevo, extremo consiguió el 11 por ciento de los votos—395.000 sobre 3.691.000, doce diputados sobre 109—. Se llama Vox; lo inventó hace cinco años Santiago Abascal, sociólogo vasco formado por jesuitas, exmilitante del Partido Popular, deportista de riesgo, hombre de a caballo y Smith & Wesson en el cinto. La bestia ya no duerme".

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