Condenada a cadena perpetua por asesinar a su exnovio arrojando ácido sobre él mientras dormía
Madrid - Publicado el - Actualizado
1 min lectura
La justicia británica ha condenado a cadena perpetua a una mujer de 48 años que había rociado ácido sulfúrico sobre su exnovio. Esto provocó que muriera por eutanasia en Bélgica, por no querer vivir con las lesiones de por vida que le había provocado el ataque. “Fue un acto puramente diabólico”, sentencia la juez Nicola Davies.
La condenada, Berlinah Wallace, una estudiante de moda, fue acusada inicialmente de homicidio, cargo que no fue confirmado por el jurado. Fue condenada por utilizar sustancias corrosivas.
Los hechos se remontan a 2015. Incapaz de aceptar que su novio, un joven ingeniero holandés llamado Mark van Dongen, la dejara, y celosa de que este hubiera rehecho su vida con otra mujer, Wallace compró una botella de ácido sulfúrico puro al 98% y consultó en varias páginas web cómo se podían cometer ataques con esta sustancia.
En mitad de la noche, aprovechó que el joven estaba dormido para vertir la botella sobre él, mientras dijo con una sonrisa: “Si no puedo tenerte, entonces nadie te tendrá”.
Con quemaduras muy graves, el cuello paralizado, media pierna izquierda amputada y ciego de un ojo, el joven permaneció en coma durante cuatro meses. El sufrimiento se prolongó durante unos meses, hasta que el 2 de enero de 2017, con 29 años, murió por eutanasia, ya que los médicos consideraron "insostenible" su “sufrimiento físico y psicológico”.