Estos son los países más peligrosos para viajar

Viajar se ha convertido en una de las alternativas de ocio más importantes para los españoles, especialmente para los más jóvenes. Los residentes en España realizaron más de 17 millones de viajes en el año 2017, un incremento cercano al 10% respecto al año anterior. 

La mayoría de estos viajes se realizan a otros países de Europa, bastante seguros, como Francia, Reino Unido, Italia o Portugal, y otros a destinos un poco más exóticos, pero también seguros, como Marruecos, Estados Unidos o Tailandia.

Pero son muchos los españoles que se decantan por destinos más exóticos en los que se incrementa el riesgo para la seguridad, bien por la actividad de grupos criminales o terroristas, por las deficientes condiciones sanitarias o por el riesgo de desastres naturales.

Para informar a los españoles de la situación en cada uno de los países del globo, el Ministerio de Exteriores incluye en su web recomendaciones de viaje para todos los Estados del mundo, que mantiene actualizadas en función de los últimos acontecimientos. Cada país tiene su propia ficha, en la que se detallan las circunstancias de seguridad y sanidad del país, entre otros aspectos. 

Existen varios niveles en cuanto a la calificación de estos países y la recomendación o no de viajar a ellos. El más extremo, son aquellos países a los que "se desaconseja el viaje bajo cualquier circunstancia y se recomienda a los españoles que se encuentren en el país que lo abandonen de inmediato". En esta lista se encuentran Yemen, que vive una terrible guerra civil desde el año 2015 y en el que "el riesgo de atentado terrorista es muy alto", "el riesgo de secuestro en todo el país es muy elevado", y además se vive una epidemia de polio.

En la misma categoría que Yemen se encuentra Siria, también en guerra civil desde el año 2011. Como indica Exteriores, "ninguna zona del país está a salvo de posibles brotes de violencia, combates, bombardeos, ataques terroristas o secuestros". Además, como en Yemen, en Siria también "la polio ha hecho de nuevo aparición en el país".

La violencia es también la razón principal por la que "se desaconseja bajo cualquier circunstancia" viajar a Afganistán. El Ministerio de Exteriores recuerda que "existe un serio riesgo en todo el país de que se produzcan atentados y secuestros". No en vano, Afganistán fue el país en el que más personas perdieron la vida de forma violenta en 2018, unas 36.000 personas, por delante de los fallecidos en los mencionados Siria y Yemen. 

Fuera de Asia, la mayoría de países a los que se desaconseja el viaje "bajo cualquier circunstancia" se encuentran en África, especialmente en la zona entre el Sahara y el Ecuador. Somalia, que vive una guerra civil desde 1991, presenta un altísimo riesgo de terrorismo y secuestro, no solo en su territorio terrestre, sino también en las aguas cercanas, donde navegan muchos piratas. Por eso "se desaconseja por completo cualquier actividad marítima, ya sea pesquera o de recreo. La navegación en las costas de Somalia y en las aguas cercanas, incluso fuera de su jurisdicción, aún sigue entrañando graves riesgos".  De hecho, dos barcos españoles, el Alakrana y el Playa de Bakio, fueron secuestrados por piratas somalíes en 2008 y 2009. 

Uno de los países fronterizos con Somalia, Eritrea, también aparece en la lista. La guerra de independencia de Etiopía, que duró 30 años, dejó grandes áreas del país en las que aún "son frecuentes las áreas minadas". Además, "el país sufre constantes crisis de escasez alimentaria" y son frecuentes los episodios de dengue y disentería.

El país más joven de la Tierra, Sudán del Sur, que logró su independencia en 2011, también presenta un riesgo elevadísimo para la seguridad. Se encuentra en guerra civil desde 2013, y "todas las carreteras son extremadamente peligrosas, con ataques y emboscadas que se repiten diariamente y puntos de control en donde los soldados con frecuencia exigen dinero a los viajeros".

Tampoco la capital del país se libra de este riesgo, ya que "las medidas de seguridad deben también extremarse en Juba, donde a cualquier hora del día o de la noche puede haber asaltos a mano armada. En caso de agresión se recomienda no oponer resistencia ya que los atacantes suelen ir armados". Además, hay un toque de queda para todos los extranjeros a partir de las 21h.

Por si fuera poco, "está prohibido hacer fotografías en el país (tampoco con teléfonos móviles). Esta prohibición afecta especialmente a aquellas zonas cercanas a edificios gubernamentales, instalaciones militares, servicios públicos –incluidas gasolineras y otras instalaciones sensibles como puentes y aeropuertos".

Con Sudán del Sur hace frontera otro de los países más peligrosos del mundo, la República Centroafricana. El país vive también una guerra civil desde el año 2012, que ha explicado varias veces en COPE el obispo de la ciudad de Bangassou, el español Juan José Aguirre. 

Como explica el propio Ministerio de Exteriores: "Todo el país se encuentra en zona de alto riesgo, ni siquiera la presencia de las tropas internacionales puede garantizar la seguridad en las zonas en las que están desplegadas por lo que se recomienda evitar viajar al país.Los riesgos para la seguridad pueden provenir tanto de ataques de los grupos armados como de actos de criminalidad común por la inexistencia de fuerzas de seguridad en RCA".

El país más cercano a España de la lista es Libia. El territorio norteafricano vive una guerra civil desde 2014, y en el país conviven al menos tres gobiernos paralelos. Libia se ha convertido en el principal foco de esclavitud en el Siglo XXI y "la inseguridad se ve agravada por la inexistencia de fuerzas y cuerpos de seguridad que respondan a una autoridad política única y por la existencia de una miríada de milicias y organizaciones dedicadas a los tráficos ilícitos así como a la presencia en Libia de células terroristas de perfil yihadista".

El último país de la lista, el más lejano y exótico, es Papúa Nueva Guinea. En este país de Oceanía, fronterizo con Indonesia y cercano a Australia, "dada la proliferación de armas de fuego y machetes en manos de particulares, el clima de violencia está muy extendido". Además, "las violaciones y los asaltos sexuales son delitos muy graves y generalizados en el país". Por si fuera poco, la situación sanitaria deja bastante que desear: "Riesgo medio de malaria en todo el país y alto en zonas selváticas. Es aconsejable seguir un tratamiento profiláctico. La fiebre del dengue sobreviene en frecuencia. Se dan brotes recurrentes de hepatitis A y fiebres tifoideas. VIH y tuberculosis son dos enfermedades de elevada incidencia y prevalencia en Papúa Nueva Guinea". Y hay un último riesgo añadido: "El país está especialmente expuesto a erupciones volcánicas, y forma parte de una activa zona sísmica. El peligro de terremotos, seguido de avisos de tsunami, es habitual".

Así pues, Yemen, Siria, Afganistán, Somalia, Eritrea, Sudán del Sur, República Centroafricana, Libia y Papúa Nueva Guinea son los países a los que el Ministerio de Exteriores desaconseja el viaje "bajo cualquier circunstancia".

Es el nivel más alto de advertencia, aunque también hay otros a los que se desaconseja el viaje "salvo por razones de extrema necesidad". En esa lista se encuentran, por ejemplo, Níger, Chad, República Democrática del Congo, Corea del Norte, Iraq, Burkina Faso, Mali, Nigeria o Venezuela.