Políticos que arrasaron en las urnas (no siempre de forma lícita)

No son pocos los países a lo largo y ancho del planeta que han tenido algún político que haya arrasado en las urnas. Este es un aspecto sospechoso, porque en las democracias más consolidadas, salvo casos excepcionales, la opinión política del pueblo suele estar más fragmentada. Son países en los que la democracia brilla por su ausencia y cuyos candidatos o presidentes se perpetúan en el poder, cambiando leyes a su antojo para poder mantenerse durante más tiempo. Esta es una lista de algunos políticos que han arrasado en las urnas durante los últimos años. África se lleva la palma en políticos con altos porcentajes de votación, pero siempre azotada por la sombra de la corrupción.

Vladimir Putin, Rusia (2018)

 El presidente de Rusia, Vladímir Putin, señaló que las elecciones en las que fue reelegido el pasado 18 de marzo con más de 76 % de los votos fueron las "más transparentes y limpias en la historia del país". "Como ya han dicho muchos, fueron seguramente las elecciones más transparentes y limpias en la historia de nuestro país", dijo Putin al reunirse con la jefa del Comité Electoral Central (CEC), Ela Panfílova. A su vez, la máxima responsable de la autoridad electoral aseguró que casi el 90 % de los ciudadanos rusos confían en la limpieza de los últimos comicios.

"Después de las elecciones se han hecho encuestas y el 88 % de los ciudadanos han mostrado confianza" en los resultados arrojados por las presidenciales, dijo Panfílova. Los observadores de la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE), sin embargo, denunciaron ausencia real de competencia en el proceso electoral, con una abrumadora presencia del jefe del Kremlin y trabas a la oposición. Al mismo tiempo, admitieron que "desde el punto de vista formal y administrativo", las elecciones se desarrollaron "razonablemente bien en un gran porcentaje de los colegios". Putin obtuvo una histórica victoria gracias al respaldo de más de 56 millones de ciudadanos, superando en 10,5 millones los votos recibidos en 2012 (45,6 millones), cuando regresó al Kremlin tras cuatro años de paréntesis como primer ministro. 

Elecciones presidenciales francesas, Segunda vuelta (2002)

Las elecciones presidenciales francesas de 2002 consistieron en una primera vuelta el domingo 21 de abril de 2002, y una segunda entre los dos candidatos más votados: Jacques Chirac, de la Agrupación por la República; y Jean-Marie Le Pen, del Frente Nacional, el domingo 5 de mayo de ese mismo año. Estas elecciones atrajeron la atención del mundo debido a la inesperada aparición en la segunda vuelta del candidato ultraderechista Le Pen.

Los atentados del 11-S en Nueva York eran todavía muy ciertos, y no eran pocos los focos xenófobos que habían proliferado en Europa. La victoria durante la Segunda vuelta en 2002 fue muy abultada, alzándose Chirac con el 82,21% de los votos (25.537.956 millones). Jean-Marie Le Pen consiguió el 17,79% de los votos (5.525.032). Se trata de uno de las victorias europeas en unas elecciones presidenciales más abultadas de la historia.

Teodoro Obiang, Guinea Ecuatorial (2016)

El PDGE, partido de Obiang, consiguió 99 de los cien diputados de la Cámara de Representantes del Pueblo y 74 de los 75 senadores de la Cámara Alta, creada tras la reforma Constitucional aprobada en el referéndum de noviembre de 2011. Ante la convocatoria de nuevos comicios, la principal formación opositora, Convergencia para la Democracia Social (CPDS), denunció que el censo ha sido "amañado" por el ministro del Interior y responsable de la Junta Electoral Nacional (JEN), Clemente Engonga Nguama Onguene.

La CPDS denuncia en un comunicado que "ante el desinterés claramente mostrado por la población por censarse, el régimen dio a sus representantes la instrucción de censar todos a los que pudieran, incluyendo niños, ausentes y fallecidos, asegurando que todo quedaría resuelto en la Oficina Nacional". Asimismo, la oposición asegura que el informe censitario fue elaborado unilateralmente por Engonga, por lo que ninguno de los partidos contrarios al Gobierno lo firmó previamente a su entrega a Obiang. El jefe de Estado fue reelegido en 2016 tras vencer en las presidenciales con el 93,7 % de los votos.

Omar Al Bashir, Sudán (2015)

La sombra del escándalo y la corrupción política viene acompañada de un número muy significativo en los últimos resultados electorales en Sudán. Ese número es el 94,5. El porcentaje de votos que perpetúan la presidencia en el poder del septuagenario Omar Al Bashir, designado por cuarta vez para gobernar durante los próximos cinco años un territorio en el que ejerce su soberanía desde su primera victoria electoral en 1989. Sin embargo, este abrumador resultado nunca estuvo exento de polémica debido a la corrupción política imperante en el país, ya que apenas tuvo oposición para alzarse de nuevo con el poder de la República de Sudán. Se trata de las segundas elecciones multipartidistas desde que llegara Bashir al poder. 

Paul Biya, Camerún (2011)

En los comicios en los que por primera vez se postularon dos mujeres como candidatas, celebrados el 9 de octubre de 2011, el actual presidente de Camerún, Paul Biya, se hizo con la mayoría de los votos. Biyá logró el 77,9% de los votos y se aseguró gobernar durante siete años más. Con ese resultado, ampliamente esperado, Biya, que lleva en poder desde 1982, se impuso de largo a su principal rival, John Fru Ndi, del Frente Democrático Social (FDS), que solo obtuvo el 10,7 de los votos. 

La abstención se situó en el 34%, según señaló el TS en un acto celebrado con una fuerte despliegue policial en la capital, Yaundé, para evitar posibles disturbios. Los datos se divulgaron al día siguiente de que el Tribunal Supremo decidiera no anular las elecciones, como habían pedido diez de los 23 candidatos opositores que consideran que los comicios fueron fraudulentos. Un grupo de siete formaciones políticas camerunesas publicó la llamada Declaración de Yaundé, en la que indicaban que no reconocerán los resultados "a causa de las muchas irregularidades y fraudes detectados en colegios electorales". 

José Eduardo dos Santos, Angola (2012)

Durante las elecciones presidenciales del año 2012, con tres cuartos de los votos escrutados, Dos Santos obtuvo el 74,1 por ciento de apoyos. El septuagenario Dos Santos llevaba, por aquel entonces, 33 años en el poder en este país. En las últimas elecciones, tras 38 años gobernando la antigua colonia portuguesa, Dos Santos decidió no presentarse, aunque ha seguido ganando su partido político. Angola es un estado petrolero que durante décadas sufrió una sangrienta guerra civil. El país vive actualmente un boom económico, aunque observadores señalan que sólo una pequeña élite se beneficia de los ingresos del petróleo, mientras la mayoría sigue viviendo sumida en la pobreza. Otro país africano que, desgraciadamente, está dominado por la corrupción política.

Rey Mswati III, Suazilandia (Monarquía absoluta)

En este país del sur africano, directamente, no hay elecciones. Pero no solo eso, ya que es la única Monarquía absoluta que queda en África. Los ministros y los políticos son elegidos a dedo por el monarca absoluto y está terminantemente prohibida la existencia de partidos o agrupaciones políticas "por deseo expreso del pueblo". Un país que ni siquiera goza de un proceso democrático, aunque fuera débil, como ha ocurrido en la gran mayoría de países del continente africano. Suazilandia posee, además, el trágico honor de albergar el mayor porcentaje de casos de sida del mundo. El rey Mswati III subió al trono con tan solo 18 años, y lleva ya 30 gobernando el país.

Paul Kagame, Ruanda (2017)

El presidente de Ruanda, Paul Kagame, revalidó su tercer mandato con un 98,66 por ciento de los votos en las elecciones celebradas en 2017 en el país, según los resultados publicados por la Comisión Electoral. Con el 80 % del escrutinio, Kagame obtuvo el 98,66 % de los votos, mientras que su principal rival, Frank Habineza, líder del Partido Verde Democrático de Ruanda (DGPR), se quedó con 0,45 % y el otro candidato independiente Phillippe Mpayimana con un 0,72 %.

En plena jornada electoral, los seguidores de Kagame ya empezaron a celebrar su victoria en la capital -fuertemente vigilada por la Policía para la ocasión- y en los suburbios. Kagame, de 59 años, lleva proclamando su victoria en las elecciones desde 2015, cuando el 98 % de la ciudadanía le avaló en un referéndum para modificar la Constitución y eliminar la barrera de dos mandatos presidenciales. En sus primeras elecciones, en 2003, Kagame obtuvo el 90 % de los votos, mientras que en las de 2010, que ya se celebraron sin una oposición genuina, logró el 93 %.

Uhuru Kenyatta, Kenia (2017)

El presidente saliente de Kenia, Uhuru Kenyatta, ganó las elecciones presidenciales del 26 de octubre de 2017 con el 98,26 por ciento de los votos, después de que los comicios fueran boicoteados por su principal opositor, Raila Odinga, según dio a conocer la Comisión Electoral (IEBC). Kenyatta obtuvo 7,483 millones de votos contra 73.228 para Odinga. La participación fue del 38 por ciento, en fuerte baja respecto a las elecciones del 8 de agosto (79 por ciento), anuladas por la Corte Suprema por "irregularidades", según precisó la IEBC. Antes de anunciar los resultados condado por condado, el presidente de la IEBC, Wafula Chebukati, opinó que estas nuevas elecciones organizadas tras las invalidadas de agosto, habían sido "libres, equitativas y creíbles".