Junto a nuestros conciudadanos

En su intervención ante la Plenaria de la Conferencia Episcopal, su presidente, don Luis Argüello, sostuvo que el valor de la crisis en la que estamos inmersos es que nos obliga a hacernos preguntas. No se refería a una crisis económica, sino a una crisis antropológica, política, institucional y de modelo de relaciones sociales.

La Iglesia comparte con el resto de la sociedad estas preguntas. El presidente de la Conferencia Episcopal ha subrayado que los católicos peregrinamos, desde una experiencia de encuentro con la misericordia de Dios, junto al resto de nuestros conciudadanos que buscan sentido al viaje de la vida o se mueven de acá para allá. Ciudadanos que expresan de forma inconsciente la secreta sed de encontrar un lugar donde descansar el corazón.

Monseñor Argüello ha sostenido que la tragedia de la DANA ha vuelto a despertar un alma común y fraterna, un deseo de compartir y ayudar. “Ni el Estado ni el mercado pueden salvarnos”, ha dicho el Presidente de la CEE, ambos necesitan de la dinámica del don gratuito que hemos visto estos días en Valencia, “para regenerarse y abandonar toda pretensión mesiánica”. Por eso ha propuesto que el Gobierno y los partidos políticos colaboren para incentivar la participación social garantizando la igualdad de oportunidades, el respeto al Estado de derecho y reconociendo el principio de subsidiariedad.