España en libertad

Pedro Sánchez ha anunciado que el próximo 8 de enero de 2025 se iniciará en España un serial de actividades culturales y eventos múltiples en calles y museos para celebrar los primeros 50 años sin Francisco Franco. Los actos programados se cerrarán el 20 de noviembre, fecha de su muerte. Y, tal como ha confirmado el presidente, será durante ese año cuando se culmine la disolución definitiva de la Fundación Francisco Franco. Todo será debidamente organizado por un Alto Comisionado y un comité científico de expertos

La transición a la democracia en España, la celebración de las primeras elecciones democráticas y el referéndum constitucional son hitos históricos cuya conmemoración podría contribuir a reforzar la participación ciudadana y la cohesión social. Por el contrario, convertir a Francisco Franco en el centro de conmemoraciones gubernamentales es un ejercicio de politización indebida cuya única razón de ser es movilizar pasiones y seguir animando la polarización para, según sus cálculos, obtener un supuesto rédito electoral.

Pedro Sánchez se ha propuesto convertir a Franco en un producto estrella. El “Francomodín” del que habla la prensa española es el as que el presidente se saca de la manga no solo para contrarrestar el cúmulo de informaciones que le acechan en materia de corrupción, sino para sacar a pasear al fantasma de la extrema derecha en un año de convocatorias electorales.