Caos frente a coordinación

La reunión del Presidente del Gobierno y de la Presidenta de la Comunidad Autónoma de Madrid podía haber sido la mejor muestra de un estilo de gobierno centrado en las necesidades ciudadanas. El pasado día 22, Sánchez representó el papel de Presidente responsable, que sabe que la cogobernanza redunda en bien de todos.

Pero hoy su gobierno se revela de nuevo como un competidor. Los mensajes de unidad y las informaciones que hablaban de reuniones semanales para coordinar las medidas necesarias para responder a la situación que viven los madrileños parece que ya son papel mojado.

El Ministerio de Sanidad ha decidido esta mañana dar la campanada justo antes de que la Comunidad de Madrid anunciara que se ampliaban a 45 las zonas confinadas. Sabedores de que la Comunidad iba a optar por medidas graduales, el ministro Illa ha hecho saber que propiciaba el confinamiento de toda la capital y de los municipios con 500 positivos por 100.000 habitantes.

Un estilo de gobierno cooperativo exige que las propuestas se discutan antes de ser anunciadas, y que se respeten las competencias de cada uno. Sánchez se movía a sus anchas con plenos poderes, porque ese es su estilo. Sin embargo cuando se trata de sentarse para dialogar y consensuar, su gobierno se revela incompetente.

O quizás ha conseguido lo que buscaba: incertidumbre, indignación y frustración. Y mientras, los sanitarios sin saber a qué atenerse, la policía sin tener órdenes claras y la ciudadanía asustada, además de enfrentada.