Línea Editorial COPE: Políticos y migración

En el mes de octubre 15.000 personas han llegado a los puertos de Canarias o han sido rescatadas por Salvamento Marítimo y la Guardia Civil en aguas de su entorno. Es algo sin precedentes. La mayor parte de esos migrantes han sido trasladados a la Península. Algunas Comunidades Autónomas han protestado por la falta de información sobre los criterios de esas decisiones.

Es lógico que las administraciones que están involucradas en los traslados y en los asentamientos de los inmigrantes reciban la información necesaria, y que todo se haga de forma coordinada. Lo que no tiene sentido es instrumentalizar políticamente el fenómeno.

Las últimas encuestas ponen de manifiesto que los españoles tenemos una visión positiva del fenómeno migratorio y sus efectos.

El 58% considera que es positiva la contribución de los migrantes en nuestro país. Y un 79 % defiende que España debe proporcionar ayuda a los refugiados.

Estos y otros datos certifican que una amplia mayoría de la población española comparte actitudes abiertas y comprensivas respecto a la migración internacional.

La mano de obra inmigrante se percibe complementaria a la autóctona. Siete de cada diez encuestados mantienen lazos amistosos con los migrantes. El mayor problema es cómo se percibe el impacto de la inmigración sobre el acceso a servicios públicos y su financiación. Por eso los políticos harían un flaco servicio a la sociedad si crean un conflicto donde no lo hay