Línea Editorial COPE: Sánchez claudica ante Puigdemont

El acuerdo entre el PSOE y Junts per Catalunya para investir a Pedro Sánchez se ha consumado. Hace escasos minutos se ha presentado un texto en el que PSOE asume buena parte del relato de los independentistas, se acuerda un relator internacional para verifica el cumplimiento de los acuerdos y se acepta formular el reconocimiento nacional de Cataluña. Todo ello supone una humillación para los mecanismos del Estado de Derecho.

En un pacto de principios, que da el pistoletazo de salida a un proceso posterior de negociación, Junts propone la celebración de un referéndum de autodeterminación de Cataluña, además de una serie de modificaciones de la Ley de Financiación de las Comunidades Autónomas para que Cataluña ingrese el 100% de los tributos. Sobre la ley de Amnistía incluirá a los responsables políticos y a los ciudadanos condenados por hechos relacionados con el proceso independentista entre 2012 y este mismo 2023.

Además, unas comisiones de investigación dilucidarán si se extiende a otros ámbitos de condena. Otro punto alarmante es la ampliación de la participación de Cataluña en las instituciones europeas y demás organismos internacionales.

Sánchez ha acordado permitir que los independentistas catalanes determinen el futuro de nuestra Constitución con una propuesta que supone la quiebra del Estado de Derecho. Ha decidido que sus intereses personales están por encima del dibujo territorial que nos dimos todos los españoles. Ha decidido anular de hecho la separación de poderes. Y, sobre todo, ha decidido, que no todos los españoles seamos iguales ante la ley. Con el acuerdo entre el PSOE y Junts la política española entra en una dinámica de inestabilidad en la que se ha puesto en riesgo la concordia y la convivencia entre los españoles.