Un paso más en la lucha contra los abusos

La depuración de los hechos, el esclarecimiento de la verdad y la asunción de responsabilidades son tres elementos clave en la lucha contra los abusos sexuales en cualquier ambiente. La Iglesia los ha asumido profundamente en su lucha contra esta lacra. La cumbre vaticana de febrero de 2019 se propuso servir a estos tres objetivos y poco a poco se van concretando medidas y se van revisando normas para favorecer el esclarecimiento de la verdad.

En esta línea se ha presentado hoy un vademécum de procedimientos para tratar los casos de abusos a menores. Se trata de un manual que da respuestas claras y precisas a las cuestiones que se plantean durante los procesos de denuncia. No se trata de nuevas normas sino de un instrumento que buscar facilitar el proceso. Es un documento que se irá actualizando periódicamente como fruto de los cambios legislativos en la Iglesia, en el que se recogen los derechos y deberes de las partes implicadas en los procesos de denuncia.

Este nuevo instrumento y los procedimientos que recoge solo tienen una razón de ser: la acogida a las víctimas, la escucha y el acompañamiento. Precisamente por eso, el proceso debe ser verificado escrupulosamente y eso exige que la formación de los profesionales implicados sea la mejor y la más precisa. El dolor causado por los abusos es grande, el escándalo desgarrador, pero el camino emprendido para afrontar este crimen y este pecado no puede detenerse. Las víctimas merecen la reparación del daño causado y merecen poder vivir en paz. Y la Iglesia debe seguir caminando con determinación firme para acoger, escuchar, acompañar y reparar.