Sánchez “colabora” con la Justicia

En los últimos meses Pedro Sánchez ha reiterado su disposición a colaborar con la Justicia. Tendremos que pensar eufemísticamente que Sánchez ha vuelto a cambiar de opinión porque hoy, después de acogerse a su derecho a no declarar como testigo en el caso en que está siendo investigada su mujer, ha decidido querellarse por prevaricación contra el juez Peinado. Su silencio y sus acciones se alinean perfectamente con el acoso al que están sometiendo al Juez varios miembros del Ejecutivo. La ministra portavoz, Pilar Alegría, ha vuelto hoy a utilizar la rueda de prensa posterior al Consejo de ministros para decir que estamos ante un montaje, que la estrategia es dar una cobertura jurídica a lo que es una causa política y que el juez ha ido hoy a Moncloa a buscar la foto.

Sánchez tiene derecho a querellarse contra el juez si piensa que está siendo injustamente tratado. Habrá que esperar a lo que decida el Tribunal Superior de Justicia de Madrid. Lo que es indudable es que ni él ni su mujer han querido ofrecer explicaciones, ni en sede judicial, ni en sede parlamentaria, ni ante los medios de comunicación. Si todo es tan limpio y evidente en este caso, no se entiende esta resistencia a dar explicaciones, como corresponde en un sistema democrático.

De momento, la forma de entender la colaboración con la Justicia por parte del presidente y su entorno es atacar al juez que está investigando unos hechos que, en todo caso, suscitan numerosas y serias preguntas.