Madrid celebra su segundo San Isidro marcado por la covid y mira al 2022 para volver a la pradera

A diferencia del año pasado, hay libertad de circulación y de reunión

Madrid celebra su segundo San Isidro marcado por la covid y mira al 2022 para volver a la pradera

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

4 min lectura

La capital ha vivido este sábado su segundo San Isidro marcado por la pandemia, y aunque la situación sanitaria ha dado el respiro suficiente como para recuperar algunas señas de identidad de la fiesta, todos miran con esperanza al año que viene con la ilusión de recuperar la normalidad y volver a inundar la pradera.

En este San Isidro a medias hay conciertos, pero no hay verbena; hay rosquillas en las pastelerías, pero no puestos de gallinejas y entresijos por el parque de San Isidro; y hay chulapos y chulapas, pero desperdigados por la ciudad en vez de haciendo cola para recibir el agua de la fuente del santo.

También hay, a diferencia del año pasado, libertad de circulación y de reunión, con el único límite de la preceptiva distancia interpersonal y el uso de mascarilla, pero la pandemia sigue y desaconseja las aglomeraciones, un mensaje que ha reiterado hoy una vez más el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida.

Almeida ha invitado a los madrileños a “celebrar San Isidro, pero con responsabilidad”, tras más de un año en el que la ciudad ha tenido que hacer “sacrificios” por la pandemia del coronavirus, que “todavía no ha acabado, aunque hay motivos para la esperanza”.

No obstante, los madrileños no han podido resistir la tentación de acudir a la pradera con sus mejores galas de chulapo para bailar el chotis o la feria alternativa que se ha celebrado en el recinto de Ifema.

Ha habido colas, asimismo, en la ermita del santo, para ver su imagen y para acceder a las restringidas misas en su honor.

Al menos 2.240 agentes de refuerzo entre Policía Nacional y Policía Municipal estarán hasta el domingo controlando las áreas de la Pradera, Parque de San Isidro, y en Las Vistillas, durante todo el día, para que no se produzca la venta ambulante y los botellones.

Sí se ha recuperado, respecto al año pasado, la agenda institucional de la fiesta patronal, que ha empezado con la vuelta de un acto que no pudo hacerse en 2020 (el izado de la bandera de España en la plaza de Colón) y ha seguido con otro que se estrenó en 2020 y ha venido para quedarse (la ofrenda floral a las víctimas de la covid en el pebetero de la plaza de Cibeles).

A continuación los fastos se han trasladado al Palacio de Cibeles, donde Almeida ha hecho entrega de las medallas de la ciudad, un evento en el que el equipo de Gobierno ha estado arropado por varios históricos del PP, incluidos José María Aznar, Alberto Ruiz-Gallardón, Esperanza Aguirre, Cristina Cifuentes, José María Álvarez del Manzano.

Tampoco han faltado el líder del PP, Pablo Casado, ni la presidenta autonómica, Isabel Díaz Ayuso, quien a través de Twitter ha agradecido que San Isidro puede celebrarse hoy "con ilusión y con esperanza", al tiempo que ha recordado la declaración esta semana de la fiesta como Bien de Interés Cultural (BIC).

La noticia era la entrega de la Medalla de Honor de la ciudad a las exalcaldesas Ana Botella y Manuela Carmena, y los días previos habían estado marcados por el rechazo del PSOE a condecorar a Botella, la abstención de Vox a hacerlo con Carmena -a quien de hecho no han aplaudido en el acto- y la crítica de los socialistas a la concesión de la Medalla de Oro al escritor Andrés Trapiello por considerarlo revisionista, postura de la que se han retractado.

Pero finalmente ha prevalecido la armonía y los intervinientes se han alejado de la confrontación política para reivindicar que, sobre todo en mitad de una pandemia, "juntos somos más fuertes", según ha dicho el alcalde.

Almeida ha llamado a construir "desde la concordia y desde la convivencia" un futuro "donde quepamos todos", y ha hecho suyo el lema del patrón de la capital para animar a seguir "labrando" y "cultivando" para luego poder "recoger" frutos cuando se supere la pandemia.

El actual regidor no ha escatimado elogios hacia sus dos predecesoras premiadas con la Medalla de Honor de Madrid, que a su vez han evitado mencionar a los partidos que se opusieron a que fueran reconocidas.

Botella (PP, 2011-2015) ha dicho que Madrid "quiere ser una ciudad abierta, libre, en una España unidad, en la que nadie levante muros para dividir" y ha destacado la lección de la "generación de españoles que dedicó sus mejores esfuerzos a la convivencia" y la "concordia".

Por su parte, Carmena (Ahora Madrid, 2015-2019) ha pedido al patrón de la capital "un milagro", recuperar “un debate político distinto” al actual, que se aleje de “la broma, la injuria y la descalificación”, y con el que se avance hacia "la escucha de los otros: una obligación esencial que rige la democracia".

Junto a Trapiello han recibido la Medalla de Oro el cantante Ramoncín, la Fundación José María Llanos y el presidente del Teatro Real, Gregorio Marañón y Bertrán de Lis.

Por último, se ha entregado la Medalla de Plata a la futbolista del Atlético de Madrid y la selección española Virginia Torrecilla, a la Plataforma del Tercer Sector, a las Hijas de la Caridad, al taxista Matías Martínez y, a título póstumo, al financiero Jaime Carvajal y Hoyos.

Programas

Último boletín

18:00H | 21 NOV 2024 | BOLETÍN