Detenidas cuatro personas en España y Marruecos por pertenecer a Dáesh

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Juan Baño, jefe de Interior de COPE

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

3 min lectura

La Policía Nacional, en colaboración con las autoridades marroquíes, han detenido a cuatro personas por su presunta vinculación a la organización terrorista Dáesh en Figueres (Gerona), Parla (Madrid) y Tánger, que suponían una peligrosa amenaza por incitar de manera directa a la comisión de atentados en España.

Según informa el ministerio del Interior, el detenido en Marruecos es un peligroso y conocido integrante de Daésh que llegó a generar más de 300 perfiles en redes sociales, mientras que los dos detenidos en Figueres -dos hermanos de origen marroquí de 30 y 31 años- se dedicaban a administrar una compleja red de comunicación para potenciar la propaganda de la organización yihadista.

El cuarto detenido en la localidad madrileña de Parla es un ciudadano marroquí nacionalizado español de 44 años que, según los investigadores, estaba en un avanzado proceso de radicalización que le había llevado ya a intentar captar cómplices con los que planear la comisión de atentados.

La Comisaría General de Información de la Policía Nacional considera a los detenidos "objetivos claves" de la lucha antiterrorista por difundir material yihadista radical en Internet e incitar de manera directa a la comisión de atentados en España, además de que todos tenían sus perfiles en redes sociales al servicio de la propaganda de Dáesh.

De los cuatro detenidos, el arrestado en Tánger era el más buscado por cuerpos policiales de varios países por su labor dentro de la dirección del aparato propagandístico de la organización. Era uno de los encargados de recopilar a diario y en tiempo real información proporcionada directamente por las distribuidoras oficiales de la organización terrorista.

Además, elaboraba diariamente dosieres actualizados y dirigidos a radicalizar al mayor número de usuarios en Internet que le seguían por la red y, aunque sus perfiles eran cerrados, empleaba claves y logos que permitían a sus miles de adeptos poder descargar los contenidos que publicaba.

Dedicados a administrar la compleja red de comunicación que Dáesh tiene para que su propaganda se difunda masivamente estaban los dos hermanos residentes en Figueres, quienes desde marzo de 2016 llegaron a publicar 400 entradas en Internet en redes sociales correos o mensajería instantánea.

Entre el material que difundían en estas plataformas a las que restringían el acceso, los investigadores tienen constatado el envío de manuales didácticos sobre la confección de artefactos explosivos de elaboración casera, sobre el apuñalamiento de civiles o ejercicios de entrenamiento de muyahidines, lo que supone una incitación directa a sus adeptos para cometer atentados.

Interior destaca como novedad delictiva que estos dos detenidos habían aprendido a "hackear" los perfiles sociales de usuarios ajenos a la causa terrorista, accediendo a sus cuentas privadas sin su consentimiento y publicando de manera ilegal contenidos proselitistas, entre otros mostrar campamentos de entrenamiento para niños, ejecuciones y fusilamientos, conductas humillantes para las víctimas de atentados o acciones bélicas.

El último arrestado, un ciudadano marroquí de 44 años y nacionalizado español que residía en la localidad madrileña de Parla es uno de los amigos virtuales de los detenidos en Figueres y que, junto con el detenido en Tánger, también estaba dedicado a adoctrinar y captar a futuros terroristas en redes sociales.

Con un perfil delictivo diferente, el detenido en Parla no guardaba medidas de seguridad y efectuaba publicaciones en abierto, mostrando un carácter más desafiante al evitar ocultarse, además de realizar tareas de adoctrinamiento sobre algunas personas de su entorno, un hecho de evidente peligrosidad ya que el avanzado proceso de radicalización que presentaba le provocaba ensalzar de manera reiterada y continua los atentados kamikazes y las acciones de martirio.

Así, los agentes han concluido que llegó a buscar cómplices entre sus seguidores al objeto de planificar un posible atentado terrorista en España.