¿Equivale una cena de empresa navideña a un team building?
Son actividades distintas que refuerzan el trabajo en equipo
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Muchas compañías aprovechan la época prenavideña para fomentar dinámicas de equipo. Es el llamado team building y la demanda de este tipo de eventos ha seguido en plena expansión en 2024 y lo mismo se prevé para 2025. Aun así, sigue siendo una práctica menos extendida que las comidas, cenas y fiestas corporativas que son toda una tradición en estas fechas.
Aunque también refuerzan el vínculo entre los trabajadores y el sentido de pertenencia a la empresa, con las celebraciones navideñas las empresas buscan sobre todo que los empleados pasen un buen rato y agradecerles el esfuerzo realizado durante el último año. Con un team building el objetivo es ante todo mejorar la cohesión y la comunicación en los equipos para facilitar un trabajo más productivo y en un clima laboral más agradable.
Los eventos corporativos en Navidad se han ido sofisticando con el tiempo, como nos cuenta Paloma, trabaja en el sector inmobiliario y tiene 36 años: “la fiesta de la empresa va a ser este viernes en una discoteca en la que tendremos un reservado para los 80 empleados. La verdad es que tiene buena pinta. Hemos ido mejorando, empezamos haciendo una comida en la propia empresa, luego en restaurantes cercanos en días de diario y después han visto que nos divertía más que fuera por la noche y sin tener que madrugar al día siguiente y la hacemos el viernes”.
Una cita anual que, según explica esta joven empleada, “está muy bien porque tenemos diferentes sedes y es de los pocos días en los que nos vemos todos”.
También Carlota está deseando que llegue este viernes la comida de Navidad de su empresa, en la que se estrena su compañera Teresa: “Hay buen ambiente todo el año y lo pasamos muy bien. Comemos en un restaurante y después nos vamos a tomar una copa para celebrar los logros del año. Lo pasamos muy bien y es algo que nos une más”.
Iván tiene 23 años y trabaja en el sector de la construcción y ya ha vivido su comida navideña de 2024 que según nos cuenta acabó en cena. Considera que con esta tradición se fomenta el compañerismo, sirve para conocer a la gente y relacionarse de forma distinta al día a día en el ámbito profesional: “lo mejor es casi la diversión de los días después, recordando las cosas del evento”, se ríe.
Para acertar conviene escuchar a la plantilla
A la hora de celebrar esta tradición los expertos en recursos humanos recomiendan tener en cuenta el número de empleados, la edad media de los equipos y las cargas familiares de la plantilla además de plantearse si realmente es una cena la mejor forma de celebrar la Navidad con la plantilla y si hay alternativas más interesantes.
Lo mejor, señalan, es apostar por la escucha activa y organizar una actividad que esté en línea con los que los empleados desean. Por ejemplo, si la plantilla es muy grande y con edades de tener hijos pequeños, una comida será más recomendable para facilitar la conciliación. Con plantillas de jóvenes, la cena funcionará mejor y también otro tipo de actividades más dinámicas y, también fuera del horario laboral, como unos karts o un escape room.
“El tamaño de la empresa condiciona mucho el tipo de actividad y, por eso, en las empresas muy grandes cada vez es más habitual que haya una celebración corporativa con todos los trabajadores y otro tipo de actividades, más en “petit comité”, para fomentar el team building entre los miembros de un mismo equipo o departamento” señala Fernando Calvo, director de People & Culture de Hays para el Sur de Europa, empresa especializada en soluciones de contratación y fidelización de personal.
Otra posibilidad son, señala, “las iniciativas solidarias y los voluntariados que están ganando cada vez más relevancia durante la época navideña, cuando la sensibilidad y la predisposición a ayudar se disparan. Las empresas pueden organizar iniciativas internas para recoger alimentos o juguetes para niños en situación de vulnerabilidad y aportar así su grano de arena”.
El team building está en pleno boom
En Synergie, multinacional especializada en soluciones globales de recursos humanos, subrayan que la demanda de actividades de team building se han multiplicado por 3 en 2024 con respecto a 2023. Según explica a COPE la directora de la compañía, María Luaces: “Casi todas las empresas lo que buscan con ello es mejorar la cohesión y la comunicación”.
¿Para qué es útil el team building? Según esta experta “porque al final somos y trabajamos con personas y todas las personas necesitamos pedir información a otros departamentos, funcionamos como sistemas y si no estamos bien organizamos, no comunicamos bien ni tenemos buena cohesión esto repercute en la productividad, en la salud laboral, en lo contento que estoy y lo eficiente que soy en el trabajo”.
Lo que mejor funciona, según explica, para lograr la integración de los equipos: “Actividades en las que podamos sonreír, que podamos compaginar con alguna actividad física y que nos permitan mostrar cómo somos fuera del ambiente laboral, que nos permitan conocernos un poco mejor. Se trata de buscar dinámicas que hagan que las personas quieran participar y abrirse para generar buenas sinergias”.
Se trata de lograr que las personas conecten y que “al día siguiente, cuando se vean en el trabajo o se llamen sea más fácil realizar cualquier gestión”.
¿Y qué pasa cuándo el ambiente en la empresa no es bueno?
En este caso los expertos lo tienen claro: las actividades deben hacerse en horario laboral para garantizar la presencialidad de los empleados y a cargo de profesionales que cuentan con dinámicas especiales para tratar de revertir la situación y mejorar el clima laboral o la colaboración de un determinado equipo.
Cuanto mayor es el bienestar de los empleados mayor es también su rendimiento, es además un elemento más para fidelizar a un trabajador. Ir a trabajar forma parte de la rutina diaria de millones de personas y los españoles pasamos una media de 1.760 horas al año en el trabajo. Parte de nuestra productividad depende tanto del entorno y el ambiente profesional que es posible mejorar.
¿Hace falta un gran presupuesto para lograrlo?
Cada empresa puede organizarse en función de los recursos de los que disponga pero según recuerda Luaces solo con incluir algún juego o concurso en la comida, la cena o la fiesta de Navidad es posible transformar una tradición en toda una dinámica de integración.