¿Cómo es posible que un gato caiga desde mucha altura y salga ileso? Se debe al reflejo de enderezamiento
Hace unos años, un felino sobrevivió a una caída de 19 pisos sin ninguna lesión grave. Los gatos tienen un reflejo innato que les permite girarse sobre sí mismos para caer de pie

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Madrid - Publicado el - Actualizado
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Los saltos de los gatos nos dejan cada vez más asombrados. Y es que hace una semana, un gato negro que se encontraba en el interior de un edificio en llamas en Chicago (Estados Unidos), se lanzó por la ventana de un quinto piso. Al aterrizar en el suelo, apoyó las cuatro patas y salió ileso, dejando a los testigos impresionados. Sin embargo, esta no es la historia más alucinante de un gato que salta desde una altura desproporcionada y se salva. En la ciudad de Boston se reportó el caso de un felino que, en 2012, sobrevivió a una caída de 19 pisos. El veterinario que lo examinó después, dictaminó que solo tenía algunas magulladuras, pero nada grave.
Por lo tanto, solamente nos cabe hacemos la misma pregunta: ¿Cuánta altura puede saltar un gato y salir sin ningún daño tras la caída? Se conoce que todos los felinos tienen una especie de "poder", ya que siempre consiguen caer de pie. Esto tiene una explicación científica, conocida como reflejo de enderezamiento. Se trata de un reflejo natural que poseen, cuya función se encuentra en una estructura del oído interno del animal. Esta es capaz de notar la posición de la cabeza cuando está en el aire, le envía una señal al cerebro y así, logra que el gato se gire sobre sí mismo, de tal manera que caiga con las cuatro patas en el suelo. A esto hay que sumarle que son unos animales con un gran sentido del equilibrio.
En el momento previo a la caída, todos los gatos tienen el mismo comportamiento. Primero giran la cabeza y la orientan hacia el suelo, para poder observar dónde van a caer; tras esto, tuercen la columna vertebral y las patas se colocan rectas, listas para aterrizar. Justo después de realizar estas órdenes, que les manda su cerebro, arquean la columna y mantienen las patas rígidas, con lo cual absorben el impacto de la caída.
Otra manera que tienen de evitar que el impacto les afecte es relajar los músculos completamente (como sucede cuando una persona se desmaya), de esta manera no sufrirán ninguna (o casi ninguna) rotura muscular y ósea. Este fenómeno también se ha comprobado con personas. Al estar inconsciente, los músculos no se tensan y son más flexibles a la hora de caer, con lo que el golpe es menos doloroso. Aunque, cabe destacar que, cuanto más alta sea la caída, más probabilidades tienen de salir sin daños. Esto se debe a que el animal dispone de más tiempo para colocarse, arqueando su espalda a modo de paracaídas, lo que hará que la velocidad de caída sea menor.
Sin embargo, todo esto no implica que los gatos no puedan sufrir graves lesiones (o incluso la muerte) si se precipitan desde una altura excesivamente elevada. Los expertos advierten que no hay que tomarse estos datos como un juego. No debemos exponer a nuestra mascota a estos peligros pensando que saldrá sin un rasguño, puesto que estamos jugando con su vida. Sobre todo, es más peligroso si sufre de obesidad o es anciano, ya que no tiene los mismos reflejos.