¿Cómo te puede beneficiar trabajar desde tu propia casa?

Silvia Sánchez cuenta en COPE que teletrabaja los viernes desde casa, empieza una hora antes que sus compañeros porque evita los atascos  y se convierte en el día más productivo de la semana. Sin embargo, solo un 7,4% de los españoles reconoce haber trabajado en alguna ocasión desde su hogar.

Los datos oficiales señalan que solo 1.430.000 personas han trabajado alguna vez desde casa, aunque los españoles que prefieren esta forma de trabajar multiplican por 10 esta cifra. Un estudio de Randstad revela que el 68,6% de los empleados españoles quiere teletrabajar, pero no puede porque su empresa no lo permite. El director de esta empresa de recursos humanos, Valentín Bote, ha explicado a COPE que  “salvo los trabajos presenciales, como camarero o transportista, calculan que el 60% de los empleos solo necesita un ordenador y un teléfono para ejercerse”. Bote añade que “muchas veces se debe al vértigo que le produce al empresario la sensación de que pierde el control de la actividad de sus empleado, aunque en la actualidad hay múltiples herramientas digitales para hacer ese seguimiento”.

Son indicadores de seguimiento como los que emplean en la startup en la que trabaja Silvia. “Mis jefes saben en todo momento si estoy conectada y el resultado de mi trabajo porque lo comprueban en tiempo real”, nos cuenta en COPE esta joven de 26 años. Es economista, con un master en comercio exterior del ICEX y ha crecido con la red y el progreso tecnológico.

MÁS PRODUCTIVIDAD

El teletrabajo favorece la conciliación laboral y familiar y, aunque Silvia no tiene hijos, reconoce que le resulta “mucho más fácil organizar su vida privada el día que se queda a trabajar desde casa”. Además, ahorra tiempo en desplazamientos y mejora la concentración mientras trabaja.

El último estudio del  INE demuestra que los teletrabajadores aumentan su productividad entre un 5% y un 25% respecto a los presenciales. El 91% de los empleados reconoce que estaría más productivo en su casa que en la oficina. “No calentamos la silla, nos dice Silvia, sino que buscamos completar el volumen de trabajo”.

Además, el director de Randstad, Valentín Bote, asegura en COPE que “las ventajas para la empresa se traducen en que puede contratar a los mejores estén donde estén y ahorra costes en electricidad, teléfono o alquiler de locales. Pero hace falta un cambio de filosofía empresarial, añade,  para que esta fórmula triunfe.”

AISLAMIENTO

Silvia es consciente que “no siempre es fácil trabajar desde casa”. Reconoce en COPE que “la flexibilidad laboral impide que desconecte del trabajo con facilidad, tiendo a contestar emails a cualquier hora  y, además,  fomenta el aislamiento de mis compañeros a los que solo veo esos días en reuniones virtuales”.

El teletrabajo comenzó siendo una forma de favorecer el empleo para personas con discapacidad, madres con hijos recién nacidos y, en general, personas con dificultades para desplazarse. En la actualidad, sirve para la contratación de empleados en otros países o la externalización de servicios. Son razones suficientes para que esta forma de trabajar triunfara en España, pero los datos son otros.  

Los expertos consultados por COPE creen que no se va a producir una revolución del teletrabajo, sino una implantación lenta y progresiva. Nos dicen que será  un cambio paulatino de las formas de organización laboral como consecuencia de la revolución informática. El mayor obstáculo al que nos enfrentamos es que tardará mucho en desaparecer el presentismo en las empresas españolas. Es la barrera, heredada de tiempos pasados,  de creer que el empleado tiene que estar en la oficina para rendir más.