El coronavirus desborda a los cuidadores de ancianos a domicilio
La mayoría de los cuidadores son mujeres extranjeras que cuentan a COPE que no tienen medios de protección para evitar el contagio
Madrid - Publicado el - Actualizado
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En España hay casi 400.000 mayores que viven en residencias, en las que trabajan 180.000 personas. Son los datos que ofrece la Asociación de Directores y Gerentes de los Servicios Sociales, que nos cuentan en COPE que “la preocupación por el riesgo de contagio en estos centros ha aumentado en las últimas horas tras registrarse la muerte de decenas de ancianos en las residencias repartidas por todo el país infectados por el coronavirus”.
Representan a los aproximadamente 5.500 centros existentes en toda España, pero los ancianos que viven allí son solo una pequeña parte de los más de 2 millones de personas mayores que viven solas en nuestro país.
Muchos de ellos han tenido que contratar a cuidadores como Paola. Es una joven chilena que cuidaba a un señor de 87 años en su domicilio de Madrid. Acudía por la mañana para ayudarle a limpiar la casa y le hacía la comida. Así, hasta la semana pasada. “El señor cayó desmayado en casa a causa de la fiebre y llamamos a una ambulancia para que se lo llevara al hospital. A los pocos días nos dijeron que había dado positivo en coronavirus y ahora yo también lo tengo” nos dice Paola en COPE.
Por suerte, el anciano evoluciona favorablemente y Paola se recupera en casa con medidas de aislamiento ya que tiene síntomas leves. Le dieron la baja y espera que no suponga ningún problema para volver a encontrar trabajo el hecho de que se haya infectado.
El 60% de estas cuidadoras trabajan como internas. Es el caso de Carmen Cruz Albán, una empleada de Qida, la empresa que presta sus servicios sanitarios en hospitales y centros de salud.
Carmen nos cuenta en COPE que “extrema las medidas de prevención para no contagiar a la octogenaria a la que cuida” del COVID-19.
“Hace días que estamos extremando las medidas de higiene en casa porque no queremos contagiar del virus. Además, procuramos que esté entretenida con la lectura, hacemos ejercicios físicos y paseamos por el pasillo mientras nos cuenta sus recuerdos de la infancia”.
AYUDA PARA LAS RESIDENCIAS
Las malas condiciones de aislamiento e higiene en varias de las residencias de mayores son objeto de críticas de numerosas asociaciones y sindicatos. Estos colectivos insisten en que se ha puesto en evidencia ese problema con esta pandemia e insisten en la necesidad de apoyo psicológico para los ancianos, más comunicación con los familiares y, sobre todo, medidas de protección para no contagiar el virus entre la población más vulnerable.
Ante todas estas reclamaciones, el Ministerio de Sanidad ha informado que está elaborando un procedimiento para proveer a las residencias de ancianos de más recursos y de la posibilidad de cerrar los centros que no reúnan las condiciones necesarias para garantizar el cuidado de los mayores que viven allí.
MAYORES Y DEPENDIENTES
Los ancianos se han convertido en la diana del coronavirus. Una pandemia que afecta a los que viven en residencias de mayores y también a los que pasan estos días encerrados en sus domicilios, solos y recurriendo a familiares o algún vecino para que les haga la compra o les traiga sus medicinas.
El problema se agudiza cuando los ancianos sufren una minusvalía que les hacer estar impedidos en cama o sin movilidad suficiente como para valerse por sí solos.
En este sentido, los trabajadores de Atención a la Dependencia reclaman al Gobierno el suministro urgente de equipos o el colapso del sistema se producirá en esta semana, como explican en un comunicado que han enviado al Ministerio de Sanidad.
Las patronales AESTE (Asociación de Empresas de Servicios a la Dependencia), CEAPs (Círculo Empresarial de Atención a las Personas), FED (Federación Estatal de Dependencia), Asade (Asociación Estatal de Entidades de Servicios de Atención a Domicilio) y LARES (Unión de Residencias del sector solidario), aseguran a COPE que actualmente “somos la única barrera capaz de contener el colapso inmediato del sistema sanitario. Si no se produce una respuesta responsable por parte del Estado en el suministro de Equipos de Protección Individual (EPIs) para las trabajadoras y trabajadores del sector en las próximas horas, estaremos abocados a una catástrofe incalculable”.
LA VEJEZ ES FEMENINA
En España hemos superado el umbral de los dos millones de personas mayores de 65 años que viven solos, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) correspondientes a 2018. De ellos, 850.000 tienen más de 80 años y la gran mayoría son mujeres: 662.000.
Viven solas y la tendencia es que cada vez sean más. La esperanza de vida de las mujeres en España es superior a la de los varones.
Seguimos siendo el tercer país del mundo en esperanza de vida después de Japón y Suiza, pero calculan que en 2 décadas les podríamos igualar, porque viviremos un promedio de 85,8 años.
Además y por primera vez en nuestra historia hemos superado el medio millón de personas con más de 90 años y hay 11.229 centenarios, de los que el 85% son mujeres.
Son datos de las Naciones Unidas que llaman la atención sobre la forma en que los mayores llegan hasta esa edad, su calidad de vida, y las previsiones de aumento de gasto que eso supone en cuestiones de salud.