Dos años sin el "Escarabajo": el coche que pidió Adolf Hitler, enamoró en Disney y cautivó a los hippies
Tras 81 años, en julio de 2019 se dejó de fabricar el Volkswagen Beetle, un coche qué marcó época en todo el mundo
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Diez de julio de 2019. Fue la fecha en la que salió de una cadena de producción, por última, vez un Volkswagen Escarabajo. Fue en México, en Puebla más concretamente, entre la enorme admiración y agradecimiento de miles y miles de personas, un vehículo dinámico vanguardista y diferente. Un coche que marcó una época y que tuvo varias adaptaciones similares, entre ellas una española, el SEAT 600. Pero más de ocho décadas después, el recuerdo permanece presente en las mentes de los fanáticos de la automoción, y por qué no decirlo, de la población en general.
Sin embargo, existe un dato destacado de este coche, es que no es el vehículo más vendido de la historia, sino que es el cuarto, a pesar de sus veinticuatro millones de unidades vendidas, una proeza que lo mantuvo en lo alto de esta lista durante varias décadas, hasta el año 1997, cuando el Toyota Corolla llegó para arrasar y alcanzar los ochenta millones de ventas. Aun así, la cuarta posición histórica, le sirvió para seguir siendo el coche de todas las generaciones de la segunda mitad del siglo XX.
Lo más destacado, sin embargo, es que la invención de este vehículo fue gracias a la idea de Adolf Hitler, quien a inicios de los años 30 pensó en un coche para transportar a la “familia alemana tradicional”, tal y como se consideraba en aquel entonces, es decir; padre, madre, hijos y equipaje. Que todo cupiera a la perfección… Y siendo realistas, lo lograron, ya que durante años pasó a ser la referencia y el icono de una sociedad alemana que atravesaba las dificultades propias de un país derrotado, en posguerra por segunda vez en veintisiete años.
Con todo, y a pesar de las dificultades propias de un conflicto bélico, el Escarabajo se muestra también como un icono de la superación de la sociedad alemana, que, a pesar de vivir en el más profundo desconcierto social y político, encontró en la producción industrial el pulmón financiero que solventaría muchas de las dudas e inquietudes propias de su situación.
Imagen de la sociedad
Llegaron los años 60, la época “yeyé” española, y la generación hippie en el resto del mundo. Durante estos años, la marca alemana, sin pretenderlo (o sí), transformó de nuevo su imagen, para identificar a todo este grupo social. Pintaban los coches con colores pasteles y representando la libertad. De hecho, el famoso disco de Abbey Road de Los Beatles, tiene un Escarabajo en su portada.
Quien también sucumbió a los encantos del coche alemán fue Disney. La película de ‘Herbie a tope’ contaba la historia de un coche que tenía vida propia y adquiría características humanas, siendo el completo protagonista de la cinta. La forma de este era la de un Beetle con el dorsal 53, imagen viva de la infancia de muchos.
Dos años después del final de su producción, el Escarabajo sigue siendo el icono de una generación, y no solo eso, sino que se mantiene como uno de los coches más inolvidables de la historia. Por sus formas, por su ligereza, por lo que representa y por la gran cantidad de recuerdos que residen en nuestras mentes al verlo.