El gesto de Margarita Robles al vacunarse en el Wanda del que todo el mundo habla

Este jueves, la ministra de Defensa Margarita Robles recibía la vacuna contra la covid-19 en el Wanda Metropolitano de Madrid. De este modo, Robles se ha convertido en la segunda integrante del Ejecutivo en tomarla (el primero fue Miquel Iceta, ministro de Política Territorial). Antes de recibir la vacuna, la titular de Defensa indicó que dentro de las Fuerzas Armadas ya habían 40.000 personas vacunadas: "Es importante también poner en valor que la vacuna es con AstraZeneca. Creo que es un paso importante".

Margarita Robles estaba citada para vacunarse a las 20:29 horas y hay un detalle que llevó a cabo que no pasó inadvertido. Como cualquier ciudadano, esperó en la cola aunque comentaba que esperaba que fuese "un poco más rápida". Por ese gesto, el esperar junto al resto de ciudadanos sin aprovechar su posición laboral, hay muchos tuiteros que han querido aplaudir a Robles a través de sus palabras en Twitter.

"Robles es una Ministra europeísta y sencilla. Otros, de menos rango, ni esperan filas y acuden a vacunarse con más coches que el Presidente norteamericano", "¡¡Mira!!! ves como no es tan difícil ser una más y no pasarse la cola por la cara. Grande", o "Una ministra hace cola como cualquier ciudadano para vacunarse. Estado del Bienestar que asegura la igualdad", eran algunos de los tuits que se referían a ese instante en el que la ministra de Defensa esperaba, como una ciudadana más, a que le llegase su turno.

Así ha recordado Margarita Robles a Mons. Juan del Río en 'Unidos en COPE': "Estoy segura de que nos estará viendo con una sonrisa"

Mons. Juan del Río era un hombre muy querido en las Fuerzas Armadas “y con muchos proyectos”, como ha recordado la ministra Robles. “En un año tan duro, en él encontrábamos mucho coraje, mucha valentía, mucho apoyo”, enumeraba la ministra de Defensa sobre algunas de las virtudes que Mons. Juan del Río inspiraba en aquellos que le conocieron.

La ministra de Defensa ha recordado también lo vivido en el Palacio de Hielo de Madrid, donde pronunció un aplaudido discurso, y donde no insistía en la importancia de la "humanidad" que todas las Fuerzas Armadas y en especial Mons. Juan del Río le transmitía. Robles explica que a ella "le tocaba" estar allí, pero que figuras como las del arzobispo castrense transmitían "esperanza y fuerza" a los soldados que tenían que desempeñar la difícil labor de acompañar a los que morían sin sus familiares para trasladarles a la morgue improvisada en el Palacio de Hielo.

"Yo creía que saldría", asegura Robles sobre la enfermedad que sufrió Mons. Juan del Río. Y es que el arzobispo castrense vivió en sus propias carnes los efectos de un coronavirus que no pudo superar.