Un joven inglés gana 190.000 euros en el Euromillones y 3 años después su vida da un giro radical: "Acusado"

Ser agraciado en un juego de azar siempre supone un motivo de alegría. Muchas de las personas agraciadas tienen dinero y un poco más no les viene nada mal para seguir viviendo con tranquilidad, aunque a otras parece solucionarles la vida, pues te embolsas una cantidad que nunca habías pensado tener. Esta acción también supone una gran satisfacción para la empresa que lo proporciona, pues consigue el prestigio y hace que los ciudadanos acudan en masa a ella a probar suerte, aunque no todo es siempre tan fácil.

En el caso de premios numéricos como la Primitiva, la Lotería, la Bonoloto o el Euromillones, hay personas que, de manera habitual, juegan una serie de números. Cada semana acuden a su administración de referencia y apuestan a los mismos números, esos que llevan jugando toda la vida, que en algún momento fueron los de sus padres o que simbolizan fechas especiales. Sin embargo, no todos los casos en los que se gana un premio importante a nivel económico, la historia tiene final feliz. Es el caso de este hombre inglés.

Gana 190.000 euros con el Euromillones, pero su vida cambia para siempre tres años después

En el año 2019, un joven de 31 años ganó más de 190.000 euros en el Euromillones. Su nombre es Reece Casey y su vida ha dado un giro radical tres años después de hacerse con el premio debido a una gestión poco apropiada del mismo. El joven británico despilfarró el premio en apuestas, junto a otros más de 60.000 euros que había ganado el año anterior.

Pues bien, tras perder la mayor parte del dinero, comenzó a estafar a amigos cercanos a través de la red social Snapchat. Según explica el diario británico 'Daily Mail', Casey publicaba una información afirmando que podía obtener un descuento del 40% de la empresa de ropa de lujo Flannels, asegurando que tenía un amigo trabajando allí. De este modo, 25 personas de su entorno, confiaron en él y llegó a defraudarles cerca de 40.000 euros.

Hace escasos días, el joven ha sido condenado a 12 meses de cárcel tras admitir el fraude en el Tribunal de la Corona de Newcastle. La fiscal Katie Spence explicó que "un amigo del acusado respondió a la oferta y pidió varios artículos. También ordenó artículos para otros amigos y familiares".

Por su parte, la abogada defensora, Kelly Sherif, explicó durante el juicio que Casey mostró un "remordimiento extremo" y que solo había tratado con tres de las víctimas, por lo que desconocía que hubiese tantas personas afectadas. El joven llevaba desde los 15 años con una afición notable al juego, algo que empeoró al hacerse con los dos grandes premios de 2018 y 2019.