Llevar mascarilla después de la vacuna contra la covid: ¿por qué se seguirá utilizando?

Hasta que haya una inmunización generalizada, no podremos decir adiós de forma definitiva a las mascarillas

¿Se pueden desinfectar las mascarillas FFP2 en el horno?

Patricia Blázquez Serna

Publicado el - Actualizado

2 min lectura

La ansiada vacuna está cada vez más cerca y todas las miradas están puestas en su llegada. Pfizer, Moderna y Oxford han anunciado altas tasas de efectividad sobre la covid-19. Es más, en Reino Unido ya han comenzado la campaña de vacunación con el único objetivo de alcanzar la inmunidad. En Estados Unidos, por ejemplo, la Agencia de Alimentos y Medicamentos (FDA) ha comenzado a evaluar la vacuna de Pfizer para comenzar a distribuirla en todo el país.

Sin embargo, y hasta que podamos llegar precisamente a esa inmunidad colectiva, aún no podremos decir adiós a las mascarillas que nos han acompañado y protegido durante ya casi todo un año. Estos son algunos de los motivos por los que aún habrá que esperar para deshacernos de ellas.

Llevar mascarilla después de la vacuna contra la covid: ¿por qué se seguirá utilizando?

La inmunización será un proceso lento

Las primeras vacunas llegarán a España desde enero y se irán suministrando de forma escalonada y progresiva durante el año 2021 a los grupos establecidos por el Gobierno. Sin embargo, será necesario utilizar las mascarillas hasta que finalice la campaña de vacunación oficial y haya suficientes personas inmunizadas contra el virus.

Hasta que se alcance la denominada "inmunidad de rebaño" será necesario que se haya vacunado, al menos, el 70% de la población, por lo que habría que esperar, como mínimo, hasta verano.

La mascarilla evita que contagies, la vacuna no

La inmunóloga de la Universidad de Stanford, en declaraciones recogidas por The New York Times, ya recordó esto: "Mucha gente piensa que una vez que se vacunen ya no tendrán que usar la mascarilla". Error. Es importante recordar que las vacunas tan solo generan anticuerpos contra el virus. Es decir, lo único que evita es que puedas enfermar pero no evita que puedas contagiar, ya que la respuesta puede no ser elevada. En este caso, el virus podría alojarse en el organismo e infectar a otros sin que una persona pueda estar enferma.

Por lo tanto, en estos casos las mascarillas también serían fundamentales.

Los test de antígenos, la tercera clave

Los test rápidos de antígenos que varias comunidades desean comenzar a realizar en las farmacias de sus autonomías tardarán en extenderse a nivel global y en llegar, de forma generalizada, a toda la población. Por ello, y hasta que los ciudadanos no puedan realizarse estos test asiduamente, la mascarilla será un elemento de protección para uno mismo y para los demás.

Estos factores demuestran que, por lo pronto, la vacuna no va a erradicar la pandemia de inmediato y deberá ser considerada como una herramienta más para luchar contra el virus. Hasta entonces, y mientras podamos, deberemos hacer uso de las herramientas disponibles para intentar combatir la covid-19 de la mejor forma posible.

Llevar mascarilla después de la vacuna contra la covid: ¿por qué se seguirá utilizando?

Temas relacionados

Programas

Último boletín

04:00H | 22 DIC 2024 | BOLETÍN