Los diabéticos tendrán desde hoy fármacos algo más baratos

La medida se decidió hace varios meses pero ha entrado en vigor el 1 de julio. Entre los medicamentos que se abaratan como parte del plan de Sanidad para ahorrar en gasto farmacéutico destacan en esta ocasión 17 fármacos destinados a personas con diabetes en 42 formatos diferentes que desde hoy verán abaratado su precio entre el 6 y el 8 por ciento para tratamientos que rondan de media los 65 euros.

La rebaja incluye los tratamientos más innovadores que son también los más caros y benefician a 9 de cada 10 diabéticos en España, los que tienen diabetes de tipo 2, más de 5 millones de personas en nuestro país, una medida que supone, en efecto, un alivio para el bolsillo de muchos afectados pero que en la Federación de Diabéticos Españoles consideran un arma de doble filo beneficiosa en el corto plazo y bastante menos a largo. Y es que según explica a COPE su presidente Andoni Lorenzo “egoístamente y como paciente a mí me viene bien la medida pero a largo plazo lo que veo es que la industria tiene que investigar y si les damos muchos palos pues es inevitable que la innovación se resienta”.

En Sanidad alegan que el precio de los medicamentos para tratar la diabetes se han disparado un 49 por ciento entre 2013 y 2018 y que es una de las principales partidas del gasto farmacéutico. El recorte forma parte del plan del Gobierno para reducir ese gasto en 1.500 millones de euros anuales.

Andoni Lorenzo cree que mejor sería repensar la forma de abordar el tratamiento de las enfermedades crónicas en el Sistema Nacional de Salud. Entre ellas está la diabetes. Y el conjunto de estas enfermedades y sus complicaciones suponen ya en la actualidad el 70 por ciento del gasto sanitario.

La rebaja del precio de los medicamentos ha suscitado nos cuenta menos interés que la financiación pública de los dispositivos tecnológicos para medir los niveles de azúcar en sangre inaugurada hace unos meses con los menores de 18 años en diabéticos de tipo 1. Esperan que pronto se extienda también al resto porque cuesta unos 120 euros mensuales y aporta mucha calidad de vida a los afectados que al fin pueden esquivar los pinchazos. Piden al fin que las ventajas sean las mismas en toda España y no dependan como sucede del lugar de residencia.