Pesetas y billetes únicos: Las monedas históricas españolas de más de 1000€ de valor

Dar valor a lo que tenemos. Cuántas veces nos han repetido ese consejo, nuestros padres cuando éramos pequeños. Una y otra vez se nos reiteraba que cuidáramos de todo lo que tenemos, que quizá algún día podría tener un valor enorme e incalculable. Seguramente recuerdes aquella colección de cromos del año 1985 en la que había auténticas leyendas de nuestro fútbol. Quizá con suerte, puede que incluso tengas guardado ese ejemplar en algún cajón donde depositas todos los recuerdos de tu juventud... ¿Te has planteado alguna vez cuánto vale?

Los museos, desde sus inicios, se encargan de guardar miles de estos objetos de este tipo, cuyo fin trata de conservarlos en el mejor estado posible para que puedan continuar siendo las maravillas que son. Hoy no hablamos de cromos, pero sí que hablamos de otros objetos que para ti puede que sean banales e inútiles en la actualidad, pero que, sin embargo, esconden un trasfondo increíble y un valor tan alto que podría resultar incluso irónico. Las monedas antiguas son desde siempre objetos de valor, aunque eso sí, no tenemos la concepción de que realmente puedan aumentar en gran medida los números de nuestra cuenta bancaria.

En España ha habido, desde siempre, gran variedad de monedas a lo largo de la historia. Sus referencias y orígenes pueden ser distintos, aunque algunas han conseguido acumular un gran valor para los coleccionistas interesados en este tipo de objetos. Por ello, el pasado jueves 10 de marzo se realizó una subasta con gran trascendencia dentro de este campo donde saldrán a concurso cuatro monedas y billetes históricos cuyo valor sobrepasa, incluso, los 1.000 euros.

Unas monedas de gran valor

En España hay cuatro monedas en concreto que cuentan con un gran valor. La primera es la de 4 escudos de 1729 que fue acuñada en Sevilla ese mismo año. La moneda cuenta con un peso aproximado de 13 gramos; su mayor peculiaridad es que cuenta con el rostro de Felipe V. Lo más curioso es el valor que tiene, ya que el precio de salida de esta moneda se sitúa en 1.000 euros lo que es muy probable que aumente debido a su gran valor histórico cuyas características únicas la convierten en una pieza muy deseada.

La peseta del año 1884 es otra de las protagonistas dentro del mundo coleccionista monetario. En este caso, cuenta también con la figura de otro clásico rey de España, Alfonso XIII. Aunque su precio es inferior a la anterior moneda se espera que llegue a alcanzar los 300 euros, igualmente supone un importante pellizco económico.

Otra de las piezas destacadas es de 1976. Se trata de un billete de 5.000 pesetas de ese año con solamente un rasguño en la parte central que puede ser todo un objeto de coleccionista debido a su estado. Por ultimo, cabe destacar la última pieza que se trata de una moneda de 100 pesetas del año 1962. De color dorado debido a su proceso de reacuñación cuenta con un precio de salida de 1.200 euros. Gracias a su brillo original es posible que la moneda supere esa cifra holgadamente y se sitúe como referencia en el mundo del coleccionismo español.