Que los jóvenes se enteren: no hay tabaco bueno o menos malo

Los neumólogos y, en general, los profesionales de la salud que trabajan con fumadores no dudan en afirmar que  aún son muchos los desafíos pendientes en la lucha contra el tabaquismo:  el fundamental es defender el bienestar y la salud de la población frente a una causa de enfermedad y mortalidad evitable, el tabaco. Para conseguirlo hay que aumentar la sensibilización sobre el problema entre los miembros de la sociedad científica, promover las intervenciones para la prevención y el tratamiento por parte de la Administración y concienciar a la sociedad de lo malo que es fumar.

Lo que siempre se ha llamado, prevenir antes que curar. Y para prevenir hay que evitar que haya más fumadores, que los jóvenes comiencen a fumar. En una sociedad avanzada, con tantos medios de información al alcance de todos, y más los denominados milenials, quien ignora que fumar mata es porque quiere. No podemos olvidar que un chico, una chica de 13- 14 años se inicia en el consumo tabaco porque sus amigos fuman, sus ídolos y referentes lo hacen, como pueden ser sus padres o sus profesores y por la facilidad para adquirirlo. Entonces ¿cómo se puede convencer a un adolescente de que no fume?

"No se puede ir por la vía de la salud porque no es lo que más importa a un joven que no ha fumado lo suficiente para que note la alteración de su salud sino poner en relación el consumo del tabaco con la mejoría en su calidad de vida. Hay que destacar que el tabaquismo le va a dar mal olor en su ropa, en sus cabellos, manchas de nicotina en los dedos, en la boca, en los dientes, que va a tener mal sabor de boca,… Las razones higiénico estéticas van a ser más poderosas para un no fumador.  A un joven hay que decirle que tendrá una mayor capacidad para hacer deporte e incluso y, esto es más impactante, que con el tabaco disminuye su capacidad sexual", enumera el neumólogo Carlos Jiménez, presidente electo de SEPAR, que subraya la importancia de acabar con la creencia de que fumar tabaco de liar es menos malo que el cigarrillo clásico, "no existe un tabaco menos tóxico,  un tabaco bueno y otro menos malo, todos los tabacos son tóxicos. Hay mala información, cigarrillos de liar, hay muchos jóvenes que fuman este tabaco, primero porque es más barato y segundo tienen la falsa idea de que son menos tóxico y no es verdad.  Es todo lo contrario, es más tóxico, produce mayor cantidad de monóxido de carbono y contiene más nicotina. Cualquier forma de fumar es dañina para la salud y no hay umbral de seguridad".

En España la Ley 42/2010, la ley antitabaco prohibe fumar en cualquier tipo espacio de uso colectivo, local abierto al público, que no esté al aire libre, con una única excepción para centros de internamiento penitenciario y psiquiátrico. No está permitida la publicidad de tabaco y entre otras campañas para luchar contra su consumo está la impresión de imágenes impactantes de los efectos del tabaco en los pulmones, boca…

Imágenes que el fumador, muchas veces, ignora y en especial los jóvenes ,"no afectan a los chicos, además se venden fundas para no verlo… Hay que tender a la cajetilla única y nada atractivas . Ya hay países en los que se ha visto que ha disminuido el consumo" señala del doctor Ignacio Granda, neumólogo, experto en tabaquismo de SEPAR  que añade este consejo a los chavales a la hora de coger o no un cigarro, "mejor no probar porque la probabilidad de que te enganches con una sola calada es de un 33%".

El personal sanitario que trabaja en las unidades de neumología y ayudan a combatir el tabaquismo coinciden en que la efectividad de las imágenes, "es positivo que aparezcan al igual que mensajes cortos en las cajetillas; muestran claramente el efecto que produce el tabaco a nivel de todo el organismo, de esta forma el fumador puede ir tomando conciencia de ello y ayudarle en algún momento a tomar la decisión de dejar de fumar" apunta María Jesús Choza, enfermera de la Unidad de tabaquismo del Hospital Nuestra Señora Del Prado .

Las imágenes impactan, es evidente, y cumplen con el objetivo de que nadie se sienta atraído por la cajetilla, "incrementan la sensibilización de los fumadores y aumentan los intentos de abandonar el tabaco; esto se ha visto en estudios de países como Australia, Brasil o Canadá donde esta medida lleva implantada muchos años" recuerda el doctor Jiménez que ve necesarias más actuaciones para controlar el tabaquismo, "no vale solo una medida deben ser un conjunto de medida. Las imágenes, ayudar a los fumadores con programas y una medida que es fundamental y en España no la tenemos porque España es un país donde menos ha subido el tabaco. Si subiera mucho el precio, los jóvenes no fumarían, subir el precio mucho,  de forma contundente, sería la mejor medida disuasoria para los chicos".