¿Por qué sigue habiendo cabinas telefónicas?
Siguen presentes en España como un servicio universal obligatorio
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Desde hace varios años las cabinas telefónicas vienen descendiendo su uso de manera drástica debido especialmente a la irrupción de las nuevas tecnologías como el teléfono móvil. La mayoría de personas poseen ya un smartphone que, además de poder sustituir o incluso mejorar los servicios que dan las cabinas, también ofrecen mejoras para la comunicación inmediata día a día como es la conexión a internet. Las cabinas se empezaron a ver por las calles a partir de 1928 y hoy en día, más de 90 años después, aún se pueden utilizar a pesar de que están prácticamente en desuso.
A pesar de que su desaparición no parecía muy lejana, las cabinas telefónicas seguirán presentes en nuestro país como un servicio universal obligatorio hasta el 31 de diciembre de 2021. A la espera de una nueva ley que o bien prorrogue esta fecha o las elimine de manera definitiva, Telefónica se encargará de su mantenimiento.
Actualmente España cuenta con aproximadamente 15450 cabinas repartidas por las vías públicas. Sin embargo, su punto álgido llegó a finales de los años 90 cuando 65000 cabinas poblaban nuestras calles. Como no podía ser de otra manera, la demanda de este servicio se ha ido reduciendo con el paso del tiempo hasta situarse de media en una llamada cada tres días.
A pesar de que su uso en un inicio era exclusivamente para comunicarse por teléfono, ya se han planteado diferentes maneras para reutilizar las cabinas. En Salamanca se instaló en 2015 la denominada Bibliocabina donde se pueden depositar libros usados para que cualquiera pudiera leerlos o intercambiarlos por otros. En Málaga algunas se han adaptado para poder cargar el teléfono móvil y utilizarlas como punto de información para los turistas. Por su parte, en Valencia se han utilizado para aumentar la calidad de la conexión a internet de los teléfonos móviles así como la cobertura de los mismos en eventos de gran afluencia como las fallas.
Estos son solo algunos ejemplos de lo que pueden llegar a convertirse las cabinas telefónicas para poder seguir viéndolas a nuestro alrededor.