Cuatro científicos detectan algo que no se sabía hasta ahora de la Tierra y que es sorprendente: el 70% de la Luna

Siempre hemos pensado que la Tierra es un planeta estable y predecible en su funcionamiento interno. Sabemos que cuenta con un núcleo compuesto de hierro y níquel, que genera su campo magnético y permite la vida tal como la conocemos. Sin embargo, un nuevo descubrimiento ha puesto en duda parte de lo que creíamos saber sobre el corazón de nuestro planeta.

Un grupo de cuatro científicos ha detectado un fenómeno inesperado en el núcleo de la Tierra. Durante décadas, los expertos sospechaban que su estructura podía cambiar con el tiempo, pero ahora han encontrado pruebas concretas de que esto es así. Y lo más sorprendente: la magnitud de estos cambios equivale al 70% del tamaño de la Luna. 

El núcleo de la Tierra está cambiando de forma

Un reciente estudio publicado por la revista Nature ha revelado que el núcleo interno del planeta está experimentando modificaciones en su estructura. Gracias al análisis de ondas sísmicas generadas por terremotos en las últimas décadas, los investigadores han detectado que el núcleo no es estático, sino que se deforma con el tiempo.

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Esta investigación, basada en datos recopilados entre 1991 y 2023, complementa hallazgos previos que indicaban que el núcleo había cambiado la dirección de su giro. Hasta 2010, giraba más rápido que la superficie terrestre, pero en la última década ha comenzado a moverse en sentido contrario. Ahora, los científicos han descubierto que su forma tampoco es estable, sino que cambia de manera significativa.

El núcleo interno de la Tierra está rodeado por una capa de metal líquido conocida como núcleo externo. Según los expertos, la presión ejercida por esta capa podría estar afectando la estructura del núcleo sólido, provocando deformaciones similares a un deslizamiento de tierras a escala planetaria. Es decir, partes del núcleo interno se estarían moviendo de una forma comparable a las rocas en una ladera.

Uno de los hallazgos más sorprendentes es que estas deformaciones alcanzan una magnitud equivalente al 70% del tamaño de la Luna. Aunque este proceso ocurre a un ritmo muy lento en términos humanos, su impacto en la dinámica interna del planeta podría ser crucial para el futuro de la Tierra.

¿Por qué cambia la forma del núcleo?

El núcleo terrestre juega un papel fundamental en la generación del campo magnético que protege nuestro planeta de la radiación solar. A medida que el núcleo externo se enfría y solidifica, el equilibrio interno de la Tierra sigue transformándose. Sin embargo, los científicos aún no pueden determinar con exactitud cómo afectarán estos cambios al campo magnético en los próximos milenios.

La investigación abre nuevas preguntas sobre la estabilidad del núcleo terrestre y sus efectos en el medio ambiente y la vida en la Tierra. Lo que está claro es que el planeta sigue evolucionando de maneras que aún no comprendemos completamente.

Aunque este descubrimiento es un avance clave en el estudio de la Tierra, aún quedan muchas incógnitas por resolver. ¿Cuánto cambiará la forma del núcleo en el futuro? ¿Podría afectar la estabilidad del planeta? ¿Estamos ante un proceso natural o hay factores externos influyendo en este fenómeno?

Por ahora, los científicos continúan investigando para comprender mejor lo que ocurre en el interior de la Tierra. Lo que parecía inmutable, ahora sabemos que está en constante cambio. Y este es solo el principio de lo que podríamos descubrir sobre el corazón del planeta en los próximos años.