Mejor gestión, menos burocracia y rejuvenecer plantillas, objetivos del CSIC

Mejorar la gestión ahora que los recursos económicos destinados a la ciencia han crecido, reducir y simplificar la burocracia, y rejuvenecer unas plantillas que están muy envejecidas; son los objetivos principales que se ha fijado la nueva presidenta del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), Eloísa del Pino.

Designada por el Gobierno el pasado 21 de junio para dirigir la mayor institución pública de España dedicada a la investigación científica y técnica, Eloísa del Pino ha valorado el aumento de los presupuestos destinados a la investigación, y aunque ha señalado que "nunca son suficientes" ha aseverado que sitúan al sector en una situación "privilegiada".

La presidenta del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha comparecido hoy en la Comisión de Ciencia, Innovación y Universidades del Senado, a petición del propio Gobierno y del grupo popular, para informar sobre las líneas generales de actuación y los cambios que tiene previsto introducir durante su mandato.

"El CSIC está en una encrucijada", ha afirmado su presidenta al inicio de su intervención, y ha incidido en que es "un transatlántico" (con 120 centros de investigación repartidos en todas las comunidades autónomas) que necesita reforzar su gobernanza y su capacidad de gestión para seguir siendo "una institución de éxito".

Eloísa del Pino ha observado que la ciencia es, junto con la sanidad, una de las áreas donde los ciudadanos fijan sus preferencias de gasto público, preferencias que a su juicio se han fortalecido durante los últimos años como consecuencia de la pandemia causada por la covid, de la erupción del volcán en La Palma o de la crisis energética a causa de la guerra.

El CSIC centra su producción e investigación en tres grandes áreas (Sociedad, Vida y Materia), ha explicado su presidenta, quien ha alineado además sus retos con la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible que se ha fijado la ONU para el año 2030 y con los de los fondos "Next Generation" incluidos en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la UE.

Del Pino ha reiterado en varias ocasiones que los recursos económicos destinados a la ciencia "son siempre escasos", pero ha valorado el aumento de los presupuestos y también la mayor contratación de investigadores y ha incidido en la importancia de mejorar la gestión y en reducir y simplificar la burocracia que "atenaza" a los científicos.

La presidenta del CSIC ha corroborado las dificultades que tiene esta institución para captar talento, en especial durante las primeras fases de la carrera investigadora, y tras advertir de que las plantillas están "envejecidísimas" ha fijado como uno de sus objetivos principales el rejuvenecimiento del personal investigador.

Ha observado en ese sentido que varios de los investigadores principales que trabajan en vacunas contra la covid tienen más de 70 años -desempeñan su labor a través de la figura de "investigador ad honorem"- y ha dicho que son "punteros y necesarios" pero que la ciencia necesita "sangre nueva".

Eloísa del Pino ha subrayado también la necesidad de promover la igualdad de género y ha descrito la situación en la institución como "una tijera" donde hombres y mujeres comienzan prácticamente al 50 por ciento pero la brecha se va agradando y abriendo conforme avanza la carrera investigadora.

Ha defendido además la necesidad de que el CSIC mejore la labor de divulgación que realiza para que la sociedad perciba el calado de los retos a los que se enfrenta la humanidad y valore el esfuerzo que la comunidad científica está realizando para afrontarlos.

La presidenta se ha referido al CSIC como el pilar fundamental de la ciencia en España, ha destacado la calidad y espectacularidad de muchas de sus instalaciones y la calidad y el talento de su personal, reconocido en muchos premios nacionales e internacionales; "nos falta un Nobel, pero queremos y podemos conseguirlo", ha dicho.

Los portavoces se han referido a esta institución como el "buque insignia" de la investigación española, han incidido en la importancia de que guíe sus objetivos sólo con criterios técnicos y científicos y no ideológicos, y han coincidido en la importancia de que la I+D+i cuente con una financiación creciente y estable y de que no esté sometida a los vaivenes políticos.