El día que 'El diario de Patricia' de Antena 3 acabó en tragedia: le pidió perdón en directo y la asesinó

Svetlana Orlova fue asesinada en manos de su ex pareja cinco días después de rechazarle en el espacio de Antena 3

'El diario de Patricia' (Antena3)

Lucía F. Gallardo

Publicado el - Actualizado

11 min lectura

El miércoles 14 de noviembre de 2007, sin predecirlo, se dio el primer paso hacia una catástrofe. Su nombre era Svetlana Orlova, una mujer de 30 años que vivía en Alicante. En la fecha mencionada acudió al programa de 'El diario de Patricia' con toda la ilusión con la que una persona visita un plató de televisión por primera vez, además, estando segura de que la sorpresa se la daría un familiar de Rusia que llevaba tiempo sin ver. Lo que ella no sabía era que aceptar esa visita al espacio de Antena 3 había sido el mayor error de su vida.

En cambio, fue Ricardo, su expareja, quien quiso sorprenderla en el formato presentado por Patricia Gaztañaga. Mientras él comunicaba que su relación había terminado por una cuestión económica, Svetlana negaba con la cabeza, ya que, con la ayuda de la comunicadora, reconoció que eso era mentira y que le había dejado porque él era muy celoso y "por muchas más cosas" que no quiso desvelar.

Con la idea de obtener sus disculpas y reconquistarla, Ricardo hincó rodilla y pidió matrimonio a Svetlana, quien, con cara de terror, negó su proposición en repetidas ocasiones. Ante la decepción del público y la presentadora, Ricardo se sentó apenado y, siguiendo los consejos de Gaztañaga, decidió aceptar que "las historias de amor también se acaban".

Pero el problema comenzó entonces. Ricardo no quiso aceptar su derrota y, antes de asumir que no tendría a Svetlana a su lado, la degolló en el portal de su casa, cinco días después de declararle su amor frente a las cámaras. A pesar de que ella se negó rotundamente a seguir teniendo una vida junto a ese hombre y a que él cuidara de su hijo de 2 años, fruto de su relación anterior, nadie se dio cuenta de que estaban presenciando un caso de malos tratos en directo.

El asesinato de la joven ocupó todas las portadas de los medios de comunicación del mes de noviembre. El agresor había decidido compartir su historia en televisión, de lo que pareció arrepentirse tras no consguir lo que quería. Después de ver las imágenes de 'El diario de Patricia' nadie sospechó del peligro que podría sufrir Svetlana, a pesar de haber confesado a la presentadora que su ex pareja era "un poco celoso" y que "la agobiaba al seguirla, yendo detrás de ella y vigilándola en todo momento". Unas declaraciones que, actualmente, se entenderían como una denuncia al acoso.

Meses después del trágico desenlace, se descubrió que, un mes antes de visitar el espacio de Antena 3, Ricardo había sido condenado a 11 meses de prisión y dos años de alejamiento de Svetlana por un delito de maltrato de obra sin lesión. No obstante, la sentencia no era firme, ya que ni siquiera el denunciado había recibido la notificación por parte de la policía.

Asimismo, no era la primera vez que ella tomaba medidas contra su maltratador. Tal y como adelantó 'El País', en marzo de ese mismo año, le había vuelto a denunciar por robarle unos documentos e impedirle salir de casa. En esta ocasión, la mujer había sucumbido ante sus suplicas y había aceptado volver a vivir con él, por lo que se archivó la denuncia. Finalmente, tras un largo proceso judicial, Ricardo fue condenado a 21 años de prisión por el asesinato de su ex pareja.

La productora como cómplice del crimen

Como ya se esperaba, muchos espectadores culparon a la productora del formato de Antena 3 del asesesinato de su invitada. Es por esto por lo que el programa tuvo que salir en su defensa y explicar con detalle como se gestionó el proceso que llevó a Svetlana a su plató y el protocolo que siguieron. Según aseguraron, todos los invitados debían rellenar un cuestionario en el que se pregunta por sus antecedentes penales y por la relación que mantiene con su "sorpresa".

No obstante, el Observatorio de la Mujer del Consejo General del Poder Judicial mantuvo su postura y acusó al programa de no cumplir con su "responsabilidad civil por daños en el derecho de la imagen y del honor de las personas".

Tal y como explicó Montserrat Comas, presidenta de la institución, para 'La Ser', "no existe ningún tipo de responsabilidad directa o indirecta del programa ni de la cadena en el crimen, pero podría haber responsabilidad civil si se confirma que no existía consentimiento de la mujer y que ella desconocía a lo que se iba a enfrentar".

Para librarse de las sospechas, Baldomero Limón, director de Boomerang, aclaró a 'Europa Press' en que consistía su protocolo: "Lo que hacemos cuando hay conflicto de parejas por medio es pasar un cuestionario muy específico a los dos, además de la entrevista que hace la redactora, en el que se les preguntan cosas como si tienen causas pendientes con la justicia, si han sido maltratados física o psicológicamente por alguien, si hay alguna orden de alejamiento con respecto a cualquier persona cercana, entre otras. Ella dijo que no, que no había nada". De la misma manera, reconoció que nadie "le dijo en ningún momento" a Svetlana que se reencontraría con su ex pareja.

Para asegurarse, la productora se puso en contacto con uno de los familiares de la joven para confirmar que todo estaba en orden. Y así fue, la persona mencionada no comentó nada que hiciera alusión a una mala relación entre la pareja, por lo que la productora continuó con la sorpresa de Ricardo, ya que al mínimo indicio de malos tratos hubiesen suspendido el encuentro.

Otro acto que descolocó a los trabajadores de la productora fue que la propia Svetlana sugirió al equipo de 'El diario de Patricia' dejar a su hijo en casa de Ricardo para que le cuidase durante su ausencia, lo que les aclaró que ella no se olía nada y que todo estaba bien entre ellos. De igual modo, según observó el equipo del formato, tras la emisión en la que ella le rechazaba, ambos salieron de los estudios con "total normalidad". Por no olvidar que ninguno de los dos quiso abandonar el plató, a pesar de que la presentadora ofreció esa posibilidad a la joven.

Patricia Gaztañaga (Antena 3)

Patricia Gaztañaga (Antena 3)

El desarrollo del juicio

En el primer día del juicio, el arrestado negó todas las acusaciones. De hecho, Ricardo aseguró que en el momento en el que se produjo el asesinato se encontraba en casa de sus padres, por lo que no estuvo en el edificio donde ella vivía, al igual que no llamó a los timbres preguntando por "una rusa", ni la esperó en el portal, lo que confirmaron varios vecinos.

En la segunda sesión, un policía, que atendió al acusado la noche del suceso, afirmó que mostraba "un corte reciente en la mano derecha" y que se encontraba bajo los efectos de alguna "medicación y estaba aturdido". Ante esto, el presunto asesino reconoció que se trataba de unos antidepresivos que tomaba desde su separación.

Dejando a un lado las justificaciones del acusado, todo indicaba que había sido el responsable, ya que, según ponía en el informe policial, "varias personas situaron al hombre en el lugar de los hechos" y apuntaron que ella "le había puesto un par de denuncias por malos tratos".

Como resultado, el ministerio fiscal pidió dos años de prisión por un delito de maltrato habitual y 14 años de cárcel por otro de homicidio para el acusado, mientras que la acusación particular, solicitó 20 años de cárcel por un delito de asesinato y tres años más por otro de maltrato habitual.

Ricardo (El diario de Patricia)

Ricardo ('El diario de Patricia')

La televisión como detonante del asesinato

En dicho momento, Rafel Mira, abogado de la acusación particular, manifestó que la humillación sufrida por el agresor, al ser rechazado en directo por Svetlana, pudo influir en el crimen.

Es por esto por lo que, actualmente, trece años después del asesinato de la joven, COPE se ha puesto en contacto con una criminóloga que ha explicado las diferentes posibilidades que se pueden haber presentado en el caso, ya que asegura que "la decisión de asesinarla, depende del perfil psicológico que presente el agresor".

"Después de analizar el comportamiento de Ricardo, se le pueden adjudicar dos perfiles, los que podrían haber desencadenado su decisión de acabar con la vida de Svetlana", ha explicado. Tras estudiar la actitud del acusado, su ira podría haber sido fruto de su "perfil narsicista". "Las personas con este perfil, al sentirse humilladas, ven afectado su ego, su autoestima y su visión de sí mismos, lo que puede generar esa furia. Dado su malestar, la única manera que tienen de sentirse mejor es el deseo por acabar con la vida de ella, quien le ha provocado ese sentimiento", ha aclarado.

Sin embargo, "un narsicista no se expondría de esa manera en público, a no ser que estuviese muy seguro de sí mismo y que no se esperase un rechazo", lo que habría potenciado su conducta homicida. De la misma manera, ha declarado que esa confianza habría sido generada por lo siguiente: "Al llevarla a la televisión, pensaría que ella diría que sí por la presión, por lo que su rabia también podríar haber sido provocada por no encontrar más formas de volver con ella".

Asimsimo, otra opción sería que su mente estuviese regida por un perfil adaptado a los roles de género. "Las personas que tienen esta mentalidad, consideran que, en una relación, el hombre debe ser varonil y quien proteja y cuide a la mujer. En consecuencia, pudo haber visto su masculinidad dañada al recibir un respuesta negativa por parte de ella, lo que también pudo generar esa necesidad de acabar con su vida. Ese rechazo habría alterado su propia visión como hombre y su solución habría sido matar a la persona 'culpable' de hacerle sentir así, y a la que considera de su posesión. Ya que por su cabeza pasa el 'si no es mía, no es de nadie'", ha argumentado.

Como conclusión, teniendo en cuenta que Ricardo puede presentar cualquier de los dos perfiles citados, se trataría de un "crimen impulsivo", ya que "parece haber sido premeditado en esos cinco días y desencadenado por la ira sufrida, una ira enfocada a la persona que culpa de todos sus males". Además, este tipo de agresor "debe tener tendencias agresivas de antes", lo que ya demostró al maltratar a su pareja meses antes de sorprenderla en 'El diario de Patricia'. Después de este análisis, se puede afirmar que, el haber sido rechazado ante millones de espectadores, habría sido el desencadenante del asesinato de Svetlana, tal y como declaró Mira.

El diario de Patricia (Antena3)

'El diario de Patricia' (Antena3)

Otros casos similares

Aunque parezca algo imposible, hay casos similares a lo que le sucedió a Svetlana. Uno de los primeros fue el de José Ignacio. En 1998, el protagonista en cuestión se esforzó por llevar a su esposa a un programa de televisión para reconciliarse, el formato elegido fue 'Lo que necesitas'. A pesar de su insistencia, debido a que se encontraban en trámites de separación, su mujer no quiso asistir. Ante su negativa, dado que ya había prometido al programa una reconquista en directo, José Ignacio apuñaló a su esposa.

Ese mismo año, Ana Belén Barroso se armó de valor y contó a Ana Rosa Quintana en su programa los malos tratos que sufría por parte de su ex pareja. Días después, la mujer volvió a denunciar por haber sufrido una agresión que pudo haberle quitado la vida. El agresor la apuñaló, pero ella logró defenderse con un aerosol, lo que le salvó de la muerte.

Asismismo, en 1999, María del Mar Herrero fue asesinada a manos de su pareja, quien la acuchilló tras escuchar cómo pedía ayuda en un programa de televisión. Además, el Consejo General del Poder Judicial tuvo que intervenir en este caso con una multa de 200 mil pesetas a un juez de Alcobendas, ya que este ignoró una docena de denuncias que había puesto la joven contra su novio.

De la misma manera, otra catástrofe sucedió tras el escenario de 'El diario de Patrícia'. En 2004, un señor se disculpó con su pareja, Teodora, por sus infidelidades, las que ella perdonó. Semanas después, todos los medios de comunicación anunciaron que la policía había encontrado el cadáver de la mujer en el maletero de un coche. Tal y como setenció la Audiencia de León, su marido había sido el culpable.

También, cabe recordar, el conocido caso de Ana Orantes. Este sucedió en 1997 cuando la mujer decidió denunciar en televisión que había sido maltratada por su ex marido durante 40 años. Según contó Orantes a Inma Soriano en 'De tarde en tarde', espacio de Canal Sur, se había casado con 19 años y, desde entonces, tuvo que sufrir las agresiones por parte de su marido. Es por esto por lo que decidió divorciarse, aunque se veía obligada a convivir con José Parejo, el padre de sus ocho hijos. Trece días después de su confesión, Orantes fue quemada viva por Parejo, quien juró vengarse de ella por denunciarle en televisión.

Tras recordar estos seis asesinatos, encontramos una prueba feaciente de que hace veinte años las mujeres seguían estando desprotegidas. Incluso, confesando ante millones de personas, sus vidas seguían estando en riesgo, un gesto valiente que provocó que, injustamente, su desenlace llegara antes de tiempo. Muchos espectadores las culparon a ellas de su final por denunciar en televisión, cuando podrían haberlo hecho en privado. Quizás, lo que el público no sabía es que, tras años intentando alejarse de sus parejas, un programa de televisión era su única salida. Pero, una vez más, ni la justicia ni parte público se ponían de su parte.