Javier Cortés vuelve a sentir el toreo

Tres meses y medio después, Javier Cortés ha vuelto a ponerse delante de un animal bravo. El torero madrileño, que perdió la visión del ojo derecho tras una grave cornada el pasado 15 de septiembre en la plaza de toros de Las Ventas, ha podido cumplir en estos primeros días del año 2020 la promesa que hizo durante su comparencia ante la prensa al recibir el alta hospitalaria: "Volveré a torear la próxima temporada porque me siento más vivo que nunca".

En el transcurso de un tentadero, Cortés ha podido volver a coger los trastos para probarse delante de las vacas con resultados satisfactorios. Un paso más en la pretensión del diestro de volver a los ruedos pese a la lesión sufrida.

Javier Cortés resultó herido durante la faena de muleta al tercer toro del concurso de ganaderías celebrado el pasado 15 de septiembre en Las Ventas.

En un pase de pecho, el animal se frenó y tiró un derrote seco que alcanzó de lleno la cara del joven torero madrileño, que, después de ser nuevamente prendido en el suelo, llegó a recuperar la vertical, con el rostro totalmente ensangrentado, aunque rápido caería desmayado justo después de echarse la mano a la zona herida.

En la enfermería de la plaza fue asistido en primera instancia de una "herida en región maxilar derecha y grave contusión en el globo ocular, de pronóstico grave" y operado posteriormente de urgencia en el Gregorio Marañón para reconstruirle el globo ocular.

Días después fue derivado al Instituto Oftalmológico de Madrid, donde, tras numerosas pruebas, determinaron que "carecía de visión". Según desveló el doctor David Antolín en la rueda de prensa llevada a cabo en noviembre tras el alta del torero, Javier ha decidido volver a torear este año y esperar a finales de 2020 para volver a ser operado y tratar de conseguir toda la visión que la cirugía permita.