Pablo Aguado: “La oreja ha tenido más repercusión de la esperada”

Una de las orejas de mayor peso del abono sevillano la paseó un torero local. Pablo Aguado toreaba su segunda corrida de toros tras la alternativa tomada en la última Feria de San Miguel. El torero hispalense aprovechó la oportunidad para reivindicarse y llamar a las puertas de las empresas de cara a una temporada que dependía de esta tarde abrileña.

Días después de esa actuación, Pablo reconocía en El Albero que se encontraba “muy contento porque salí de la plaza con ciertas dudas porque siempre uno quiere más. Pero después no me esperaba que la oreja hubiese tenido tanto calado. Ojalá sirva para abrirme paso en el resto de temporada”.

Una oreja que llegó en el sexto toro de Torrestrella después de haber perdido quizá otro trofeo en el primero de su lote. “Yo sé que esto va toro a toro. Estaba cabreado pero intenté que no me influyese en el sexto porque es verdad que en mi primero tenía la oreja si no hubieses sido por culpa de la espada. Pero luego salío el sexto y se me olvidó”.

Un trofeo, en Sevilla que debería valer como pasaporte para entrar en nuevos carteles. “Debería...”, reconocía Aguado en COPE. “Aún no hay nada cerrado pero estamos seguros de que debe servir para ir poco a poco entrando en otros carteles, en ferias. Esta oreja ha tenido más repercusión de la que yo esperaba”.

“Ser 'torero de Sevilla' se consigue muy a largo plazo”

Además, su actuación en Sevilla tuvo un nota muy especial para Pablo Aguado. Su padre había fallecido unas semanas antes y esta oreja “fue una forma de hacerle feliz”, expresaba el torero. “En contra de lo que pudiéseis pesar, yo lo sentí más cerca que nunca. Fue mucha casualidad que ese día se fuera la lluvia, que me tocara el lote de más opciones... seguro que él me ayudó desde ahí arriba. De esta oreja tuvo él mucha culpa”.

Este oreja le ha colocado a la cabeza de los toreros sevillanos de la nueva hornada y ya se le calificado incluso como 'torero de Sevilla'. Sin embargo, Aguado quiere seguir con los pies en el suelo. “Ser 'torero de Sevilla' son palabras mayores. Como le tengo tanto respeto a eso... yo tengo que centrarme en ir día a día. Lo mismo que ahora he triunfado, si no sigo después a este nivel dejaré de ser torero se Sevilla”, finalizaba.