¿Cómo montar unas claras a punto de nieve a mano y sin batidora?

En COPE.es te estamos explicando algunos de los trucos caseros más relevantes para tu día a día. En este caso, queremos abordar dos temas culinarios. El primero es crucial para todo buen repostero que se precie, hablamos de subir o montar unas claras de huevo a punto de nieve. Es una elaboración que nos puede servir para muchas otras recetas, como un merengue o, la que vamos a explicar aquí, un ‘Brazo de gitano’ o tronco de Navidad.

¿Cómo subir las claras a punto de nieve a mano?

Una de las dificultades que podemos encontrarnos en la cocina de nuestra casa es la de no tener una batidora o incluso unas barillas para poder batir las claras y montarlas hasta el punto de nieve. Aunque se trata de una incomodidad, no debe ser impedimento para que podamos hacerlo con un simple bol de cristal y un tenedor.

¿El secreto? Batir incansablemente y durante minutos. En esta elaboración, hemos tardado un poco más de 8 minutos batiendo las claras hasta que hemos llegado al punto de nieve. Hace falta paciencia y mucha energía, pero al final llegaremos a un momento en el que las claras se mantengan firmes en el bol y su consistencia sea totalmente espumosa.

Aprovecha las claras y haz… un ‘Brazo de gitano’

Como decimos, se puede aprovechar el punto de nieve que hemos conseguido con las claras del huevo para realizar muchísimas recetas. Pero la que hemos elegido nosotros es la del clásico ‘Brazo de gitano’, con una ligera modificación, realizado con galletas María.

Para ello necesitarás:

Receta ‘Brazo de gitano’ con galletas María

Montar las claras a punto de nieve siempre es recomendable hacerlo al final de la receta, porque, si las dejamos reposar, se acaban bajando y la espuma que habíamos conseguido con tanto esfuerzo acaba por volverse líquida de nuevo.

1. En un recipiente coloca la tableta de chocolate con un chorrito de leche y deja que se funda en el microondas. Tardará sobre 3-5 minutos.

2. Haz lo mismo con la mantequilla y fúndela en el microondas. Cuando tengas mantequilla y chocolate fundidos déjalos reposar para que se enfríen un poco.

3. Mezcla las yemas de huevo con el azúcar. Que quede una pasta homogénea, casi sin grumos.

4. Mezcla con cuidado la mantequilla con las yemas y el azúcar. La mejor forma de mezclarlos es haciendo círculos, de forma que la parte de la masa que se queda por fuera entre en el centro y viceversa.

5. Una vez tengas todo por separado, es el momento de juntar la mezcla de huevo, azúcar y mantequilla con el chocolate fundido y con las claras a punto de nieve. Necesitarás un bol grande para ello y debe quedar una pasta líquida que servirá como cemento del ‘Brazo de gitano’ y como cobertura.

6. Comienza la elaboración. Es un momento delicado y hay que ir uniendo las galletas María entre sí, utilizando como pegamento la mezcla de chocolate que hemos elaborado. TRUCO: en las primeras galletas apóyate con un tenedor para mantener firme la estructura. Además, hay que mojar las galletas en leche un poco caliente con azúcar. Una cosa rápida, sin que lleguen a deshacerse.

7. Cuando esté terminada la estructura de galletas solo queda poner el chocolate como cobertura. De ahí a la nevera y dejamos enfriar.

8. Es bueno ir viendo qué tal va la ‘Brazo’ cada 10-15 minutos. Lo lógico es que la cobertura de chocolate vaya cayendo al plato y no se quede pegada de primeras. Ahí lo mejor es sacar periódicamente el postre y volver a cubrirlo con el chocolate por encima. Con el frío y el paso del tiempo, la cobertura se fijará en un postre que, sin duda, hará las delicias de toda la familia.