El error que cometes al hacer un perrito caliente

El perrito caliente, también conocido como frankfurt en algunos lugares de España, es uno de los platos de comida rápida más populares en nuestro país, donde muchos disfrutan de este sencillo plato con salchichas y pan cuando tienen ocasión, sobre todo en eventos señalados como ferias o fiestas veraniegas.

El perrito caliente, nacido en Alemania y crecido en EEUU

La historia del perrito caliente tiene sus orígenes en la Alemania del Sacro Imperio, donde las salchichas de Frankfurt se repartían a los asistentes a las coronaciones de los nuevos emperadores. Más tarde, se desarrollaron en Austria las salchichas vienesas, que combinaban carne de cerdo con carne de ternera.

Según cuenta la leyenda, fue un inmigrante de Frankfurt llamado Feuchtwanger el que llevó las salchichas a los Estados Unidos, donde comenzó a venderlas en Saint Louis, una de las ciudades más importantes del Medio Oeste norteamericano a comienzos del siglo XX, que llegó a albergar los Juegos Olímpicos de 1904.

A partir de ahí, los perritos calientes se convirtieron en uno de los platos más populares de los Estados Unidos, donde comenzaron a asociarse con dos de las salsas más populares en la gastronomía norteamericana, sin los que ahora parece imposible imaginar un 'hot dog': el ketchup y la mostaza.

¿Por qué se llaman perritos calientes?

Desde el siglo XIX, el término 'perro' se utilizaba habitualmente en los países anglófonos para designar a las salchichas, ya que muchos acusaban a sus productores de incluir carne de estos animales en su elaboración. Desde finales de ese mismo siglo, se empezó a designar el término 'hot dog' para hablar de aquellas salchichas que ese vendían calientes en las calles norteamericanas, y de ahí se pasó al sándwich que todos conocemos ahora, cuyo nombre en español se adaptó del inglés como 'perrito caliente'.

Ver esta publicación en Instagram The #MightyOregon Ducks are coming! @rosebowlgame #RoseBowl2020 #MightyOregonDucks #RoseBowl2020 #granddaddyofthemall�� Una publicación compartida de Pinks Hot Dogs (@pinkshotdogs) el 11 Dic, 2019 a las 12:01 PST

Los ingredientes de un perrito caliente

Uno de los puntos importantes a la hora de elaborar un perrito caliente es elegir bien los ingredientes. En principio, un perrito caliente debe incluir al menos tres ingredientes principales:

Elegir bien las salchichas, clave para un buen perrito caliente

La salchicha es el ingrediente clave del perrito caliente y de su calidad y su elaboración depende en gran medida el sabor que tenga finalmente este plato. Lo ideal es utilizar o bien salchichas frankfurt o bien salchichas vienesas, las más adecuadas para este tipo de platos.

Ketchup y mostaza, los condimentos más habituales

Si preguntas a cualquier norteamericano con qué salsa quiere acompañar sus perritos calientes, te contestará que con ketchup y mostaza. Estas dos salsas que acompañan normalmente a esta preparación son las más tradicionales, pero no las únicas. La mayonesa, la cebolla frita, los pepinillos en vinagre, el puré de patatas, el chili, los frijoles, el guacamole o las salsas barbacoa son otras de las opciones con las que podemos acompañar nuestro 'hot dog' para darle un sabor más contundente.

El peor error que cometes con los perritos calientes

Como hemos visto, ninguna de las salchichas con las que habitualmente se elaboran estos 'hot dogs' está pensada para ser elaborada a la plancha o la parrilla. Ponerlas al fuego solo servirá para que la piel se reseque, y no cruja, y pierda la ternura que caracteriza la carne de las salchichas, dificultando mucho su consumo y facilitando rupturas desagradables en la piel que recubre el embutido.