La nueva epidemia que ya está entre nosotros y amenaza con afectar a la mitad de la población: no se cura
Un defecto del sistema inmunológico del cuerpo humano provoca este tipo de reacciones que, sobre todo, afectan más a los niños pequeños
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Una alergia es algo tan básico como que nuestro cuerpo reacciona de forma exagerada a algo que en teoría no es dañino para nosotros, como por ejemplo la leche. De un tiempo a esta parte, los estornudos, la congestión nasal, los picores o el enrojecimiento de ojos se han instalado en nuestra vida y cada vez son más las personas que los sufren. Pero, ¿qué ha causado este boom? Por qué cada vez hay más gente a nuestro alrededor a la que se le diagnostica alguna alergia. Se nace con ella o se puede desarrollar en cualquier momento.
No entiende de edades, aunque es cierto que algunas son más típicas de las primeras infancias y otras son más de la edad adulta. Aun así, estas pueden darse en cualquier momento de nuestra vida. Todos tenemos una predisposición genética. Esta viene de nuestros progenitores y nos permite saber que si los dos son alérgicos, nosotros vamos a ser alérgicos; que en el caso de que uno de los dos sea alérgico, hay más posibilidades que si ninguno de los dos lo es. Aunque es posible hablar también de la influencia exterior.
A día de hoy nos lavamos mucho más, los niños están muy limpios siempre, lo que favorece que sean más alérgicos porque la barrera cutánea está más desprotegida y pueden entrar los alérgenos a través de la piel. Pero no es la única. No comemos lo mismo que comían nuestros familiares, abuelos o padres. Y por último, la epigenética, el entorno, está favoreciendo que nuestros genes cambien: contaminación, cambio climático. Todos los factores anteriormente mencionados, de forma conjunta, pueden ser la causa de que cada vez existan más alérgicos.
¿Es una nueva epidemia?
A día de hoy consideramos que una de cada cuatro personas es alérgica, en torno al 25-30%. Es posible que en 2050, el 50% de la población será alérgico. Es una realidad que cada vez hay más alérgicos. Si hablamos de las alergias más comunes, va a depender de la edad. En los primeros años de vida, las alergias alimentarias son las más frecuentes, en concreto la leche y el huevo. Avanzando en edad aparecen otros alimentos como los frutos secos, las frutas, el marisco, o los pescados. Si miramos a nivel global, lo más frecuente son las frutas. Pero no solo existen las alergias a los alimentos.
Existen distintos tratamientos para tratar las alergias, pero los antihistamínicos no son la única herramienta. En el caso de las enfermedades respiratorias existen también corticoides inhalados, corticoides tópicos y vacunas. Si el diagnóstico está bien hecho, se ponen vacunas y se modifica el curso de la enfermedad. En el caso de la alergia a los alimentos, sobre todo en los niños, cuando no la superan al huevo o a la leche, se plantean desensibilizaciones. Consiste en una administración progresiva y poco a poco, para que el cuerpo pueda conseguir tolerancia.