Solomillo Wellington, pizza Margarita…: los ilustres apellidos que esconden algunas de las comidas más famosas
Gastronomía y nobleza han mantenido una estrecha relación desde el principio de los tiempos
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Cuántos platos degustamos en nuestro día a día, cuyo origen desconocemos. Condes, reinas y duques que en guerras, viajes o grandes eventos han inspirado famosísimos platos, salsas, tartas y postres. Desde el solomillo Wellington a la ternera Strogonoff, pasando por la tarta Sacher, repasamos de dónde proviene el nombre de tan deliciosas comidas.
SANDWICH
De jamón y queso, de pollo, de ternera, de bacon… son innumerables sus posibilidades y todas ellas están riquísimas. Acompañados con ensalada o con patatas fritas, son una deliciosa merienda o una buena comida en esos días que vamos corriendo a todos sitios y no llegamos a ninguno. Y precisamente de ahí viene su nombre, de las prisas y, en este caso, del juego. El cuarto conde de Sandwich, estaba obsesionado por jugar a las cartas, hasta tal punto que no quería perder ni un segundo en comer. Por eso pidió a su servicio que le llevasen cualquier comida metida entre dos rodajas de pan; algo rápido y fácil de comer. De ahí el nombre de tan conocido tentempié.
SOLOMILLO WELLINGTON
Este lomo de buey cubierto con paté, envuelto en lonchas de jamón y hojaldre y horneado tiene un incierto origen aunque son muchos los que lo relacionan con Arthur Wellesley, primer duque de Wellington. Una de las teorías explica que se trata del nombre patriótico con el que se bautizó a un plato servido durante una recepción civil en Wellington, Nueva Zelanda.
La primera receta registrada que lleva este nombre apareció en un libro de cocina de 1996. Otra teoría apunta a que este plato fue bautizado así porque tenía mucha similitud con las botas militares marrones brillantes que llevaba el duque, conocidas también como bota Wellington.
CARPACCIO
Carne de vaca, de ternera, de venado, de salmón, de atún, de avestruz o de potro finamente cortada o majada.
A mediados del siglo XX esta carne se servía con limón, aceite de oliva y trufa blanca o queso parmesano. Fue inventado en 1950 por Giuseppe Cipriani del Harry's Bar de Venecia, donde habría sido preparado a petición de la condesa Amalia Nani Mocenigo, a quien su médico le había prescrito comer carne cruda.
Por su similitud de color con las obras del pintor Vittore Carpaccio, con abundancia de rojos y amarillos en sus obras, habría sido bautizado de ese modo.
TERNERA STROGONOFF
Se trata de un filete de ternera cortado en tiras no muy gruesas, con setas y salsa de crema agria, servido con patatas fritas.
Unos cuentan que este plato nació cuando la vejez dejó con pocos dientes al conde Grigori Alexandrovitch Stroganov, por lo que su cocinero personal inventó para él un plato fácil de masticar. Pero la historia más extendida sobre los orígenes de este plato, que data del siglo XIX, y cuenta que un chef que trabajaba para el conde Pável Aleksándrovich Stróganov, el famoso general ruso, inventó la receta durante una competición de cocina en San Petesburgo. Tras la caída del imperio ruso, la receta se popularizó y se extendió internacionalmente.
En la actualidad, casi todos los países tienen su propia versión de este plato. En China por ejemplo, sustituyeron la crema agria por especias.
PIZZA MARGARITA
Calzone, Diavola, Marinera, Barbacoa… y el eterno dilema que divide a la sociedad, ¿con o sin piña?... De masa fina o gruesa, con los bordes rellenos… hay multitud de pizzas, con diversos ingredientes que hacen de esta elaboración una de las preferidas por mayores y niños en el mundo entero.
Una de las más conocidas es la pizza Margarita; típica pizza napolitana condimentada con tomate, mozzarella, albahaca fresca, sal y aceite.
Cuenta la leyenda que debe su nombre a la reina italiana Margarita de Saboya. El cocinero Raffaele Esposito, de la pizzería Brandi, creó esta pizza representando con sus condimentos (tomate, mozzarella y albahaca) los colores de la bandera italiana. De hecho, fue la primera receta en incorporar queso.
TARTA SACHER
Este delicioso pastel de chocolate típico de Austria, consiste en dos planchas gruesas de bizcocho de chocolate y mantequilla separadas por una capa de mermelada de albaricoque y recubiertas de chocolate negro. Normalmente, suele servirse con crema chantilly.
Fue inventada en 1832 por Franz Sacher, aprendiz de repostería, para deleitar a un grupo de invitados del príncipe Klemens Wenzel von Metternich. Después de pasar 16 años trabajando en Bratislava y Budapest, Sacher volvió a Viena y abrió una tienda de vinos y productos gourmet. Eduard, su hijo mayor, que fue aprendiz de repostero en la confitería vienesa Demel, empezó a confeccionar la tarta de su padre en la forma que hoy conocemos.
En 1876 fundó el Hotel Sacher, todavía hoy existente, y comenzó a vender la Sachertorte. Tras la muerte de Eduard Sacher, su esposa Anna continuó regentando el hotel.
Desde 1832, esta famosa receta se ha transmitido generación tras generación y se ha mantenido guardada en una caja fuerte.
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