Si tienes hambre, ¡come!; así es la alimentación intuitiva
No se trata de seguir una dieta que restrinja alimentos, consiste en comer de todo de una forma sana, comedida y consciente.

Imagen de recurso
Madrid - Publicado el - Actualizado
3 min lectura
Hay quien vive en una eterna dieta, una esclavitud con el fin de no sumar unos kilos en la báscula que luego son muy difíciles de controlar. E este contexto surge la conocida como 'alimentación intuitiva' cuyo objeto es precisamente demostrar que se puede ser feliz y sentirse bien con uno mismo sin necesidad de recurrir a estas dietas. Es decir, no es cuestión de seguir una dieta que restrinja alimentos, consiste en comer de todo de una forma sana, comedida y consciente.
"Te ayuda a que vuelvas a conectarte con tu cuerpo y a conocer sus necesidades para mejorar tu salud e imagen propia de forma natural y sin restricciones y enseña a eliminar el comportamiento negativo de comer en exceso o a darse atracones con ciertos alimentos", según explican los expertos de Altrient que destacan algunos de sus beneficios:
Si tienes hambre, ¡come!
La principal razón por la que las dietas fallan es porque suelen dejarte con hambre y para saciarla, se come con ansiedad. Este tipo de alimentación te ayuda a saber qué alimentos escoger, en qué cantidades y tomar consciencia de cuando uno se ha saciado. Es importante dejar de contar calorías y aprender a construir platos equilibrados y completos.
TE PUEDE INTERESAR: El truco definitivo para freír el pescado sin olor: En la misma sartén
Disfruta de la comida
Compra alimentos de buena calidad en mercados y cocínalos utilizando especias para añadirles sabor. Ten un ritual de comida, adorna la mesa, haz un emplatado colorido y apetitoso y come sin prisas. Esto ayudará tener un equilibrio y a disfrutar del placer de los alimentos.
Diferencia las buenas opciones
Aunque la alimentación intuitiva no te impide darte ningún capricho momentáneo, es importante escoger ingredientes saludables y ricos en nutrientes y vitaminas. Apuesta por verduras y frutas de temporada, carnes magras, pescados y grasas saludables. Es un estilo de vida que te mantendrá en tu peso ideal de una forma sana, real y permanente.
Planifica un menú semanal
Si planificas las comidas semanales de manera consciente, te va a asegurar el éxito de una alimentación más saludable. Además, conseguirás comer mejor y ahorrar dinero. Si entre semana no tienes tiempo, siempre puedes recurrir al método batchcooking y, cocinar en pocas horas, la comida de toda la semana.

Eating,Out,,Lifestyle,And,Travelling,Concept.,Portrait,Of,Pretty,European
No confundas el hambre real con el emocional
El hambre emocional surge repentinamente y pide al organismo satisfacer esa “necesidad” con un alimento específico, que por lo general está asociado a dulces, patatas fritas, chucherías o comida rápida, en definitiva, a alimentos ricos en hidratos de carbono y en grasas. Nace como respuesta al malestar emocional y en vez de investigar qué es lo que nos afecta, se entierra comiendo. Lo interesante, además de poner freno a los excesos gastronómicos y regularlos, es investigar sólos o con ayuda profesional que nos está pasando, ponerle remedio si es posible y si no lo es asumirlo y tratar de superarlo.
Suplementa tu alimentación con Vitamina C
Es una de las vitaminas más demandadas por el organismo, especialmente en invierno, ya que, además de ser un potente antioxidante, ayuda a reforzar el sistema inmunológico. Una dosis extra de Vitamina C ayudará a aliviar los síntomas de un resfriado y a acortar su duración. El cuerpo no puede sintetizar la vitamina C, la tenemos que absorber y por lo tanto hay que utilizar suplementos nutritivos.