Tutoriales COPE: Cajitas de regalos sorpresa

Ya pueden salir a la calle. Desde este domingo. Pero aún es poco tiempo, una hora. Una hora para tomar el sol, el aire que circula más limpio, una hora y después, hay que regresar a casa y continuar las otras 23 horas del día confinados.

Llevan muchos días resistiendo dentro de nuestros hogares y eso se merece un regalito. Como tampoco están abiertas todas las tiendas, os proponemos hacerlo nosotros con materiales que todos tenemos en casa y además podemos recuperar algún muñequito olvidado o un anillo o un colgante o, simplemente, una moneda para la hucha. Algo que les pueda hacer ilusión porque a todos nos gusta que nos hagan presentes. ¿A quién le amarga un dulce? Por cierto, un caramelo, un bombón, también puede servir como obsequio.

Pues nos ponemos manos a la obra:

Lo primero que necesitamos es los rulos del papel higiénico. Según se vayan acabando los rollos no debéis tirar los rulos, canutos, el cartoncillo (cómo lo llaméis en casa). En realidad, es la materia prima, será nuestra cajita mágica, nuestra caja sorpresa.

En segundo lugar, papel de regalo, papel charol, papel cebolla, un folio en blanco si preferís poner una frase o hacer vosotros mismo el dibujo.

Tercer material imprescindible, pegamento de barra, del que usan los niños para el cole. En cuanto al resto de materiales y para adornar el paquetito, pues cinta de regalo o pegatinas de corazones o de muñequitos -que seguro tenéis en casa y están por ahí olvidadas y las podemos rescatar-. Incluso, podemos hacer los adornos con cintas de papeles de colores.

Necesitamos: tijeras, grapadora, lapiceros y regla para medir la longitud del papel.

Elaboración de la cajita regalo sorpresa

En primer lugar, medimos el papel para recortarlo. Un rulo de papel higiénico suele medir 9 centímetros o un poquito más de largo, por ello mediremos unos 10 centímetros y medio en el ancho del papel que hayamos elegido. Como tenemos que enrollarlo alrededor del cartoncillo, vamos a cortar el largo del papel en unos 15 centímetros.

Cortado el papel, le damos la pega por el revés y forramos, con cuidado de que no se nos hagan bolsas, el rulo. Como nos sobrará un poquito de papel por cada lado, lo cortamos al ras del cartoncillo.

El siguiente paso es doblar los bordes. Primero por un lado y luego por el otro, de tal forma que nos quedará como una cajita.

Si el papel es muy colorido o con dibujos grandes puede que no necesitemos más adornos. Si es liso, como el que he elegido para hacer la demostración, le podemos poner algún adorno: cintas, pegatinas, lazos...

Ya tenemos la cajita, metemos la sorpresa y a esperar que les guste.