Madrid - Publicado el - Actualizado
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El menor, de 17 años, A.V.F, que agredió a Mariano Rajoy, puede enfrentarse a una condena de uno a seis años, de los cuales, según la Ley del Menor, cumpliría el primero, presumiblemente y puesto que al parecer, está en tratamiento psiquiátrico, en el centro de internamiento terapéutico cerrado de menores, de Montefiz, aledaño al complejo de Monteledo en Orense y el resto en una prisión convencional.
¿Cómo sería su vida en ese centro? Allí, el agresor de Rajoy, tendría que levantarse, como los demás internos, a las 8,45 de la mañana y tras realizar labores de limpieza, además de seguir las indicaciones terapéuticas de los profesionales del centro, acudiría diversos talleres ocupacionales y formativos en los que podrá hacer deporte, aprender a hacer pan el el obrador con el que cuenta el centro o a confeccionar alfombras, por ejemplo y recibirá charlas relacionadas con el delito que ha cometido, en su caso, agresión a la autoridad, con el agravante de que esa autoridad, forma parte del Gobierno.
El
, similar al de Montecelo, que la
tiene expuesto en su web y que adaptan a las necesidades médicas de cada interno, es amplio y variado, con cremas de calabaza o zanahorias, caldo gallego, pollo con champiñones, fabada, merluza a la plancha, tortilla de patata o atún.
Una vez por semana, podrá recibir visitas familiares durante dos horas, pero en ningún caso podría salir él del centro. Al cumplir los 18 años, salvo que les quede muy poco tiempo de condena y el juez lo avale, los internos pasan, automáticamente, a una prisión convencional para cumplir el tiempo que les resta.
Dadas las circunstancias médicas del agresor y la gravedad del delito de agresión a un miembro del Gobierno, contemplada en el artículo 550.3 del Código Penal, “si la autoridad contra la que se atentare fuera miembro del Gobierno, de los Consejos de Gobierno de las Comunidades Autónomas, del Congreso de los Diputados, del Senado o de las Asambleas Legislativas de las Comunidades Autónomas, de las Corporaciones locales, del Consejo General del Poder Judicial, Magistrado del Tribunal Constitucional, juez, magistrado o miembro del Ministerio Fiscal, se impondrá la pena de prisión de uno a seis años y multa de seis a doce meses”, muy probablemente A.V.F., será enviado a ese centro de internamiento terapéutico cerrado y es poco probable pueda cumplir ese año, antes de pasar a prisión, en su provincia ya que en Pontevedra, aunque hay cinco centros de internamiento de menores, solo uno, el Centro Educativo Avelino Montero, es de régimen abierto y semiabierto, con escasa vigilancia, como han denunciado en reiteradas ocasiones los trabajadores del centro.