Dani Alves se tomó una copa después de la presunta agresión sexual y se cruzó con la víctima sin mirarla

Dani Alves cumple este viernes una semana en prisión. El lateral derecho brasileño fue denunciado por una presunta agresión sexual a una joven de 23 años en la discoteca Sutton de Barcelona el pasado 30 de diciembre. El 20 de enero acudió a declarar y acabó en la prisión de Brians en la que permanece desde entonces y hasta la celebración del juicio ya que la magistrada entendió que existía riesgo de fuga.

Desde entonces se van conociendo cada día nuevos detalles de lo que pasó aquella noche. Según informa La Sexta, el futbolista habría sido el primero en salir del baño en el que habría violado a la mujer tras 16 minutos allí dentro, tal y como revelarían las cámaras de seguridad del local, para ir directo a la barra y pedirse una copa. Dani Alves llegó incluso a cruzarse con la presunta víctima, cuando esta estaba siendo atendida, siendo incapaz de mirarla o dirigirse a ella pese a su estado de nervios.

La joven, se mostraba muy nerviosa y lloraba mientras denunciaba que había sido agredida sexualmente por Dani Alves. Según la declaración del jefe de sala, recogida por el diario La Vanguardia, la joven "no tenía consuelo. Yo le preguntaba: ¿pero qué te ha pasado? ¿Cuéntame qué te ha pasado! Tienes que tranquilizarte. Pero estaba muy agobiada".

Por su parte, el abogado del jugador, Cristóbal Martell, habría desvelado que tiene redactado el recurso que va a presentar y en el que se va a reconocer que Dani Alves "cometió infidelidad, pero no agresión" con el objetivo de que el brasileño pueda evitar la cárcel. Su idea es proponer medidas cautelares que garanticen que no huye a su país de origen. Joana Sanz, pareja del jugador ha eliminado todas las fotos en las que ambos salían juntos en las redes sociales y le ha dejado de seguir.