Cádiz rinde homenaje a José Pedro Pérez-Llorca, “uno de los gaditanos más ilustres”

El Ayuntamiento de Cádiz ha rendido homenaje hoy al gaditano José Pedro Pérez-Llorca Rodrigo con la colocación de una placa en su casa natal, situada en la Alameda Apodaca, 12. El alcalde, José María González, ha sido la persona encargada de descubrir la losa en la que reza: ‘En esta casa nació y vivió José Pedro Pérez-Llorca Rodrigo, ponente de la Constitución Española de 1978. Excmo. Ayuntamiento de Cádiz. 22-noviembre-2019’.

A este acto homenaje ha asistido un nutrido número de autoridades y amigos y familiares del homenajeado, entre los que se encontraba su viuda, Carmen Zamora. El regidor ha destacado la figura de Pérez-Llorca, “uno de los gaditanos más ilustres, padre de la Constitución Española, y un gaditano de pro, inolvidable”. Con este homenaje se cumple con “una palabra dada y, lo más importante, con una voluntad que estoy absolutamente convencido de que a José Pedro le hubiese encantado”.  

Zamora ha manifestado sentirse “agradecida y emocionada” con este homenaje, y también se ha pronunciado el ex ministro y exsecretario general de la OTAN, Javier Solana, presente en el acto: “Resulta muy emocionante que sea la ciudad la que reconoce a un ciudadano gaditano, español y europeo. Una persona de enorme valía, muy amigo mío y compañero de las Cortes Constituyentes. Hemos estado en bancadas distintas en el Parlamento, pero siempre llevándonos muy bien, como personas civilizadas, y manteniendo la amistad”.  Y ha resaltado la “inteligencia” y la “capacidad de generar acuerdos y consensos” de Pérez-Llorca. 

Con el descubrimiento de esta placa se ha recordado la figura del político, diplomado y jurista gaditano que fue designado Hijo Predilecto de la Ciudad de Cádiz en el año 2002 por el Ayuntamiento de Cádiz, y también fue nombrado Hijo Predilecto de la Provincia de Cádiz en 2013 por la Diputación gaditana.

Pérez-Llorca, que nació en Cádiz el 30 de noviembre de 1940 y falleció en Madrid a los 78 años el pasado 6 de marzo, fue una figura trascendente en la política española, ministro de Exteriores en la época en la que España miraba con decisión a Europa y en los últimos años presidió el Real Patronato del Museo del Prado, uno de los focos más potentes del arte en España.