Asidonia-Jerez
Rico Pavés: "La Ascensión del Señor es fiesta de victoria, esperanza y alegría exultante"
El obispo de Asidonia-Jerez aborda la celebración de este domingo en su comentario semanal para la programación socioreligiosa de COPE
Jerez - Publicado el - Actualizado
2 min lectura
La tradicional celebración del jueves que es cuadragésimo día desde el primero de la Pascua abrió ayer ese marco en el que comenzar a sentirnos en medio de la Solemnidad de la Ascensión de Cristo que, por otra parte, hace tiempo que es observada el último domingo antes del de Pentecostés. Y monseñor José Rico Pavés dedica su reflexión semanal a ese misterio: "Jesús asciende, ante el asombro de los ángeles, a lo más alto del Cielo". Su comentario para la programación socioreligiosa de COPE le permite explicarnos que "no falta razón a quienes, en la antigüedad cristiana se refieren a la liturgia como vida del Cielo en la Tierra".
Escúchalo aquí. "Cómo podríamos conocer el asombro de los ángeles si el Cielo no hubiera entrado en la Tierra", exclama profundiando en el misterio por el que "la Ascensión del Señor es fiesta de victoria, de esperanza y de alegría exultante; lo que asombra a los ángeles llena de vida a los hombres". E insiste: "La Ascensión de Jesucristo es ya nuestra victoria porque donde nos ha precedido Él, que es nuestra cabeza, esperamos llegar también nosotros como miembros de su cuerpo; la Ascensión de Jesucristo fortalece nuestra esperanza porque el Señor cumple sus promesas". "Su fidelidad sostiene nuestra espera", sentencia.
"El que ha comenzado en nosotros la hora buena tambien la llevará a término" dice. "Anterior a la Ascensión es la Misión, los discípulos predicarán la conversión y el perdón de los pecados a todos los pueblos en el nombre del Señor, Jesús convierte a los suyos en portadores de esperanza" apunta, no en balde "para los discípulos de Jesucristo esperar significa actuar en su nombre". La Ascensión de Jesucristo llena a los discípulos de gran alegría.
Concluye su reflexión el obispo de Asidonia-Jerez constantando una "extraña paradoja" consistente en que "el Maestro se aleja para permanecer de una forma nueva; no se llora la ausencia de quien se queda, se celebra el gozo de la nueva presencia". "La promesa del Paráclito es cierta: no hay abandono sino precedencia", explica. Y continúa explicando que "donde está la cabeza estarán los miembros; Jesús se separa mientras bendice a los suyos y los discípulos se postran ante Él". "La alegría necesita adoración y reconocimiento; Jesucristo, habiendo entrado de una vez por todas en el santuario del Cielo, intercede sin cesar por nosotros como el mediador que nos asegura para siempre la efusión del Espíritu Santo" añade.
También te puede interesar:
Rico Pavés: "Derechos constitutivos de la persona son sustituidos por otros inventados"
Chequeo al clero asidonense: "Nos sentimos queridos, se nos reconoce la labor"
Se dan los primeros pasos para elevar a los altares al Hermano Adrián del Cerro