La Real Posada y la iglesia de la Inmaculada Concepción, dos edificios destacados de La Carlota

La Carlota es un municipio cordobés que cuenta con un interesante pasado y un singular y rico patrimonio histórico. Antonio Martínez, historiador y profesor de Geografía e Historia, nos ha explicado dos edificios destacados de esta localidad. Se trata de la Real Posada y la Iglesia de la Inmaculada Concepción.

La Real Posada y Fonda de La Carlota fue un edificio construido por iniciativa del subdelegado Fernando de Quintanilla, primer gobernante de La Carlota, para dar alojamiento tanto a los viajeros del Camino Real de Madrid a Cádiz, que discurre por esta población, como a los propios colonos que desde 1768 iban llegando a La Carlota, pues la colonia aún se hallaba en construcción y se carecía de viviendas.

Por otro lado encontramos la Iglesia de la Inmaculada Concepción. Se trata de un templo peculiar, "de estilo a caballo entre el Barroco y el Neoclásico, y que encierra varias curiosidades interesantes", afirma el profesor Martínez.

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La Real Posada y la iglesia de la Inmaculada Concepción, dos edificios destacados de La Carlota

Escucha a Antonio Martínez, historiador y profesor de Geografía e Historia

También es sumamente importante el Archivo Parroquial, pues gracias a él los habitantes naturales de La Carlota y algunas poblaciones dependientes de ella pueden reconstruir sus antepasados colonos, que se remontan siete u ocho generaciones en el tiempo. Finalmente, en cuanto a su patrimonio material destacan, aparte del edificio en sí, algunas esculturas de su interior, por ejemplo la imagen de la Inmaculada, titular de la parroquia, que se atribuye a Pedro Duque Cornejo.

Este fue un importante artista sevillano sobrino de la gran escultora Luisa Roldán y que llegó a ser escultor de cámara de la reina Isabel de Farnesio, esposa de Felipe V y madre de Carlos III. Tanto de la iglesia como de la Real Posada y del resto de edificios de la colonia carloteña se desconoce su autoría por falta de fuentes que la indiquen expresamente, lo cual constituye otro motivo más de interés y atracción hacia su propio patrimonio histórico para los investigadores y también para el público en general.